La candidata presidencial de Sigamos Haciendo Historia, Claudia Sheinbaum, presentó aquí su propuesta para el campo, que incluye entre otros puntos un nuevo modelo de financiamiento justo a los pequeños y medianos productores, la transición tecnológica y revisar las concesiones y derechos de agua, “por consenso porque no se necesita un conflicto”.
México “era soberano y autosuficiente en muchos productos, que ahora importamos. Tenemos que cambiar la dinámica de 36 años que hicieron del país uno de los más desiguales del planeta y con mayor pobreza”, dijo después de que Julio Berdegué, especialista en materia de agricultura desglosó el plan.
En el teatro de la ciudad, Sheinbaum explicó que se busca “fortalecer la soberanía para el maíz en particular y evitar que se siembre maíz transgénico en el país. Pero no solamente el maíz, sino también otros productos agrícolas”.
Abundó que en su proyecto “las mujeres del campo serán prioridad” y ofreció consolidar los programas sociales relacionados con el sector agrícola como Sembrando Vida, la entrega gratuita de fertilizantes, y
producción para el bienestar.
Otro punto tiene que ver con la tecnificación del riego, “por dos razones: el agua es hoy quizá el recurso más escaso en el país por una sequía prolongada en el centro y norte que ha generado problemas no solamente para la agricultura, sino incluso para el consumo humano; y porque 77 por ciento del agua se va al riego agrícola. ¿De dónde podemos sacar más agua? Justamente del riego agrícola y esa agua tiene que ayudarnos a aumentar la productividad en el campo, ampliar la soberanía alimentaria y como eje central el derecho humano al agua”.
Además planteó un cambio a la Ley de Aguas para revisar las concesiones y cómo se otorgan los derechos de agua, “y hay que hacerlo por consenso porque no necesitamos generar conflicto relacionado con eso, sino que todos sabemos que es un tema que hay que entrarle”.
Otro punto es un nuevo esquema de financiamiento, después de que en el actual gobierno se desapareció la Financiera Rural, “y tenemos que encontrar otros mecanismos de financiamiento justos, que no lleguemos a la situación de antes, en donde se beneficiaba siempre a los que más tenían y muy poco a los que menos tienen”.
Asimismo, un programa de precios justos y de acceso a mercados.
“Todos sabemos el gran tema de los intermediarios en el país, que genera desigualdades enormes con grandes ganancias de un lado y por otro lado precios muy bajos de ciertos productos. Hay que mantener evidentemente los precios de garantía, pero revisar producción y comercialización a través de esquemas de acuerdos y de revisiones de los procesos de compra”, abundó.
Sheinbaum resaltó que el país necesita ir hacia una transición agroecológica.
“No podemos seguir cultivando de la misma manera, porque eso va a provocar todavía más sequía, pérdida de suelos y, a la larga, menor soberanía alimentaria”.
También, y como resultado de las propuestas de los productores locales, se presentó el denominado Plan Campeche, que -dijo Berdegué- pondrá énfasis en la producción de arroz y leche, para garantizar el abasto de la entidad, después de la Península “y más allá”.
Con el proyecto se busca que Campeche “recupere su posición como gran productor de ese cereal. Estamos importando casi todo el arroz que comemos. No es una maldición. Tenemos los elementos”, planteó el ex subdirector general de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
En el caso de la leche refirió que se busca fortalecer a Liconsa e incrementar la compra a los pequeños productores nacionales.
Con información del periódico La Jornada