Yo le creo al Presidente.
Si habla de participantes del crimen organizado en el movimiento de normalistas de Ayotzinapa, debe tener información suficiente.
Pruebas útiles para actuar cuando así lo decida.
Además, como él nos convenció desde su larga campaña por llegar a Palacio Nacional, un jefe de Estado está informado de todo.
Nada le es ajeno ni en su entorno familiar o inmediato, con sus colaboradores y cuanto sucede e incide en la gobernanza.
A su soporte acuden los servicios de inteligencia y, como nos dijo en el caso del desafuero, le informan hasta meseros y trabajadores de un hotel.
No nos dio detalles de la participación de personas ajenas en los incidentes del fin de semana, cuando quienes pretendían tomar la caseta de la Autopista México-Cuernavaca bajaron al chofer y lanzaron un camión de Soriana contra la Guardia Nacional y policías estatales.
Simplemente nos dijo:
“Tenemos información de que hay gente dedicada a actividades ilícitas infiltradas en este movimiento… a lo mejor ni ellos lo saben”.
SEP, ESTEBAN Y DELFINA
Lo trascendente es saber qué sigue.
Cómo va a proceder su Gobierno.
Como experiencia, vale la pena una historia:
Al llegar al Gobierno de Michoacán, el perredista Silvano Aureoles se dio a la tarea de revisar el movimiento magisterial.
Para regularizar a miles de profesores, ordenó revisar individualmente los casos presentados por la CNTE, quienes cobraban, y en el parte asentó:
-Servando Gómez, La Tuta, tiene plaza y cobra como maestro a pesar de estar preso y sentenciado.
Luego, al verse la descentralización, reportó:
-Hay unos tres mil elementos que están identificados como miembros del crimen organizado y exigen plaza y salarios regulares.
La información la recibieron los mandos medios comisionados primero por Esteban Moctezuma y luego por Delfina Gómez para federalizar la nómina.
Nada ha pasado.
Ahora Silvano Aureoles anda fuera del país porque así cree preservar su vida, temeroso de ser víctima de una vendetta.
-Es un viejo odio -me dice una fuente perredista-. Andrés no platicó con él ni cuando era presidente del PRD y Silvano ya era un cuadro importante.
Tampoco lo hizo cuando coincidieron, él en la Presidencia y Silvano en el Gobierno de Michoacán.
CESADA PERO GANADORA
Miren Eukene Vicente Ertze gana en la desgracia.
Ella era directora de Obras Públicas del Ayuntamiento de Comalcalco -antes fue de Protección Civil- y fue destituida por quejas porque no gustaron sus manejos.
¿A quién?
Según medios locales, a Daniel Gómez Arellano, muy cercano al senador tabasqueño con licencia y recién designado director de Fonatur Javier May.
Gómez Arellano se quejó por falta de respeto a sus contratos y, nadie pudo abogar por ella, quien pagó fue Miren Eukene Vicente Ertze.
Pero de inmediato fue recompensada: se encargará de Fonatur en Quintana Roo, estado importantísimo para el sexenio por la generación de divisas.
Desde Palacio Nacional se ve al turismo como esperanza para sostener la economía -el otro apoyo son las remesas- y la península es vital.
Por ahora ha ordenado acelerar el tendido del Tren Maya, pero vienen otras obras de trascendencia como el aeropuerto internacional de Tulum.