Sin duda los números le serán favorables.
No por méritos propios, pues Morena carece de militancias masivas, bases estructuradas, estrategia y capacidad de movilización.
Pero ha encontrado su modus vivendi y modus operandi en la figura de quien capitalizó errores de regímenes pasados y ofreció un futuro de promisión.
Por ello todos sus candidatos usan la imagen del tabasqueño como bandera de campaña, reforzada por presidenciables y secretarios de Estado enviados del centro.
Tres han sido las figuras centrales en este uso de los recursos y de la función pública: Adán Augusto López, de Gobernación; Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno, y Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores.
También han acudido las principales figuras parlamentarias: Ricardo Monreal Ávila, aspirante presidencial y jefe del control político del Senado de la República, e Ignacio Mier.
Ellos han insuflado a quienes desde Palacio Nacional se han enviado como representantes del patrón con la intención de administrar los seis estados donde habrá elecciones el domingo.
¿RECURSOS DE DÓNDE?
El mejor escenario son 4 a 2.
Cuatro estados para el partido del Gobierno y dos -Aguascalientes y Durango- para la oposición… sin contar la mano del crimen organizado.
Este fue decisivo en junio de 2021 en los resultados electorales de Michoacán, Sinaloa, Sonora, Nayarit y Baja California Sur, sostiene el dirigente perredista Jesús Zambrano.
Él advierte sorpresas en varios lugares, sobre todo Quintana Roo, Tamaulipas y aun en Oaxaca, donde amplios contingentes morenistas se han pasado a la alianza Va por México.
Quizá esas fugas en Quintana Roo y Oaxaca no den para derrotar a Mara Lezama y Salomón Jara, pero sí pueden tener trascendencia en Aguascalientes, único lugar seguro según el jefe panista Marko Cortés.
Ahí varios coordinadores de Nora Ruvalcaba se han pasado al bando de la panista Tere Jiménez, quien trae dos dígitos de ventaja sobre la morenista pese a la gran inyección de recursos.
Todavía circulaba el Hidrocálido con el encabezado Fractura en Morena, cuando el petista José Narro Céspedes acudió en apoyo de Ruvalcaba y destacó el flujo de recursos.
Si lo dicho en privado es cierto, desde el centro le fueron inyectados a la campaña de Nora 80 millones de pesos y en los últimos días le enviaron 100 millones más.
Poco para ganar un estado, pero mucho porque es el margen de cualquier control de las autoridades electorales y sobre todo cuando provienen del aparato oficial.
Aun así, revelan todas las encuestas, Nora Ruvalcaba va por su tercera derrota en Aguascalientes, dos como perredista y ésta como morenista.
LAS SUMAS DE PALEROS
No hablamos de gente menor.
Por ejemplo, en las elecciones municipales pasadas Karla Espinoza estuvo a punto de ganar el segundo municipio en importancia del estado, Jesús María, y abiertamente anunció:
-Yo no voy con Nora -su correligionaria contendiente por la gubernatura por tercera vez.
Otro disidente es Ricardo Leos, quien fuera subdelegado general de programas sociales y ahora participa en la estructura de Tere Jiménez.
Por algo las prisas de renunciar de candidatos paleros petistas y verdes para aparentar un crecimiento morenista en varias plazas del país.