>> La reforma viola los derechos de los mexicanos en el extranjero, fue omisa en describir de manera expresa cómo votarán para elegir juzgadores federales y locales
>> Es improvisada y deficiente, los ciudadanos recibirán hasta 25 boletas para escribir un promedio de 450 nombres y deberán depositarlas en 25 urnas
>> Todavía quedan recursos para echar abajo la reforma
·>> Los especialistas Mario Di Costanzo y Miguel Sulub advirtieron de las consecuencias económicas y de la falta de diálogo con estudiantes y trabajadores
El proceso para aprobar la reforma al Poder Judicial en el Congreso de la Unión se dio de forma tan apresurada que no planteó cómo sería la votación de los mexicanos en el extranjero para seleccionar a los juzgadores federales y locales, afirmó Rubén Moreira Valdez, quien agregó que por la misma premura los gobiernos estatales, como Oaxaca, la avalaron a minutos de su aprobación en el Senado de la República, sin la deliberación democrática correcta.
En su programa “Con Peras, Manzanas y Naranjas”, acompañado del economista Mario Di Costanzo y del abogado Miguel Ángel Sulub, el líder congresista criticó que este cambio a la Constitución no contemple de forma expresa la participación efectiva de los mexicanos que viven en el extranjero para que seleccionen a los juzgadores federales y locales. Seguro, dijo, tratarán de justificarse con otros artículos constitucionales o futuras leyes secundarias; sin embargo, fue un descuido y con ello se hace patente la deficiencia del texto.
“Incluso, uno de los transitorios prohíbe todas las interpretaciones, por lo que debe tomarse de manera literal y eso crea confusión, pues al no establecerse el derecho expresamente ni señalar como se ejerce parece que se cancela el mismo”, manifestó.
Por otro lado, el legislador priista agregó que el mexicano en el extranjero tendría el derecho a participar en la selección de juzgadores para su entidad de procedencia. Pero, expuso, hay problemas muy prácticos; por ejemplo, un jalisciense en Chicago tendría que recibir boletas para seleccionar juzgadores federales y de su entidad, y si en la misma fila está un coahuilense sería lo mismo. Todas estas incógnitas y complicaciones, advirtió, son producto de una reforma improvisada y regresiva.
Recordó que la reforma no es ni justa ni democrática ni popular, engaña a la gente con una narrativa falsa e improvisada, que no dice nada del voto de los mexicanos en el extranjero. Seguro, recalcó el exgobernador de Coahuila, van a salir con alguna respuesta frívola, pero lo cierto es que no se discutió el voto en el extranjero ni se explicó cómo se va a operar.
Enfatizó que la reforma tiene grandes defectos en su redacción y es de tal calibre su improvisación, que nadie del oficialismo ha resuelto cómo se votará, si nos atenemos a lo que dice lo aprobado. Por ejemplo, un ciudadano que vote en la Ciudad de México recibirá 25 boletas, deberá escribir hasta 450 nombres y depositar su voto en 25 urnas, una verdadera locura.
“La idea de llevar a la constitución temas muy específicos, como el diseño de las boletas, dejaron a nuestra carta magna como un recetario, pero lo más preocupante es que se impide que en las normas secundarias se arreglen los problemas, porque se corre el riesgo de que sean inconstitucionales”, destacó Moreira Valdez.
Finalmente, subrayó que hay acciones legales que los partidos políticos y ciudadanos pueden utilizar para impugnar la reforma, como lo es la acción de inconstitucionalidad, los primeros, y los amparos los segundos.
En su oportunidad, el economista Mario Di Costanzo advirtió que la aprobación de la reforma judicial traerá consecuencias económicas, como poner en duda el Tratado de Libre Comercio, la calificación soberana del país y la famosa relocalización con el nearshoring. Precisó que también se pone en riesgo el trabajo y bienestar de miles de familias, escenario que puede propiciar una recesión en el primer año del próximo gobierno.
En su participación, el abogado Miguel Ángel Sulub externó que en medio de las traiciones, ausencias y golpes que se registraron en la sesión del Senado, sorprendió que los que forman parte del bloque mayoritario cuestionaran el ingreso de los manifestantes al recinto. Apuntó que los diputados de Morena no tuvieron la capacidad de evitar esos conatos por no sentarse a dialogar con los inconformes.