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Estira y afloja

Durante 2022, el Fondo Mexicano del Petróleo (FMP) transfirió a la Tesorería de la Federación un total de 636 mil 332 millones de pesos, cifra mayor en 265 mil 404 millones a las estimaciones previstas en la Ley de Ingresos de la Federación aprobada para ese año y muy por encima de los 238 mil millones para el pago pensionario de adultos mayores. Los recursos petroleros recaudados son tanto de Pemex como de empresas privadas.

El FMP es un ­fideicomiso público administrado por Banco de México como fiduciario, mientras que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público actúa como fideicomitente. Los recursos que administra son para promover el desarrollo social, inversiones en infraestructura, becas para estudiantes y para el pago de pensiones, entre otros objetivos.

De los recursos transferidos de enero a diciembre, 97.5 por ciento se destinó a cubrir el Presupuesto de Egresos de la Federación por un total de 620 mil 140 millones de pesos, y el resto se fue a municipios colindantes con la frontera y litorales donde se realiza la salida de hidrocarburos y al Fondo de Extracción de Hidrocarburos.

Un aspecto importante del último informe del FMP se refiere en especial a los contratos empresariales que se firmaron en la segunda licitación de la Ronda Uno para explotar la riqueza de los campos Amoca, Mizton y Tecoall (AMT) con la petrolera italiana ENI; los campos Ichalkil-Pokoch (IP) operados por Fieldwood Energy y PetroBal, la subsidiaria de Grupo Bal que preside Alejandro Baillères, y el campo Hokchi en manos de Hokchi Energy, filial de la argentina Pan American Energy en consorcio con E&P Hidrocarburos y Servicios.

Las inversiones de estos tres contratistas a diciembre pasado fueron de 4 mil 122 millones de dólares, con lo cual uno de cada tres dólares invertidos a la fecha bajo el esquema de contratos corresponde a esta licitación. Extrajeron 37 millones de barriles de petróleo a noviembre de 2022 y se ubicaron entre los 25 campos con mayor producción en México.

“Se estima que la producción acumulada a 2040 sume 778 millones de barriles; más de 30 por ciento de la producción fue entregada al Estado como pago de contraprestaciones, generando a la fecha ingresos por 861 millones de dólares. En 2040 los ingresos acumulados del Estado pueden alcanzar 35 mil 895 millones de dólares. Estos campos petroleros no contaban con producción previa”, y en términos de reservas probables, éstas han incrementado entre una y cuatro veces durante los últimos siete años”.

Las reservas probables por campo subieron de 188 millones de barriles en AMT antes de la licitación en 2015 a 626 millones como contrato en 2022 (más 233 por ciento); IP pasó de 195 millones a 977 millones (más 401 por ciento) y Hokchi de 93 millones a 187 millones de barriles (más 101 por ciento).

jesus.rangel@milenio.com