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En el gobierno y su partido hay alegría.

Tienen doble razón:

Del Instituto Nacional Electoral (INE), de Guadalupe Taddei, y del Tribunal Electoral, de Mónica Soto, tienen las mejores promesas.

Ambos organismos están listos para dar sobrada mayoría calificada al oficialismo –hasta tres cuartos en lugar de los dos tercios necesarios- en la Cámara de Diputados.

Traducido a lenguaje legislativo, el gobierno, su partido y sus fardos –en realidad fardos de la nación: Morena, PT, Verde- están listos para complacer a Palacio Nacional.

Lo primero, porque así lo han jerarquizado, es abolir en agosto los primeros siete órganos autónomos necesarios para dar equilibrio a la función pública.

Usted los conoce por su funcionalidad y servicio a la nación durante varios lustros: Inai, Coneval, Cofece, Mejoredu, IFT, CRE y CNH.

Luego vendrá el capricho clave: debilitar al máximo al Poder Judicial de la Federación y menguar la función de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

SOBRAN TRAIDORES

Tras los objetivos, hablemos del sustento.

Si no fallan con sus respectivos votos los consejeros ni los magistrados electorales, en San Lázaro no habrá defensa posible contra estos dictados presidenciales.

Ahora las dudas se trasladan al Senado de la República, donde serán necesarios de dos a tres votos –el INE de Guadalupe Taddei y el Trife de Mónica Soto tienen la decisión- para dar los dos tercios.

Aquí está la clave: abundan los diálogos con posibles traidores a la oposición, desde priistas hasta emecistas y por supuesto panistas prominentes.

El oficialismo sabrá a quiénes tiene prácticamente cooptados, pero en la lista aparecen exgobernadores, exdirigentes partidistas y plurinominales encartados por Alejandro Moreno, Marko Cortés y Dante Delgado.

Les sobran prospectos porque sumarse a la supuesta 4T les significan muchas cosas: dinero, posiciones, poder, apoyos, cargos para familiares y no se diga para seguidores.

Con estos avances, el futuro coordinador Adán Augusto López debe estar tan tranquilo como Ricardo Monreal en Palacio Legislativo: los votos les llegarán desde el Ejecutivo.

Y ellos se lucirán tan campantes.

HUÉRFANOS DE CUÉN

El crimen de Héctor Melesio Cuén ha dejado muchos huérfanos y secuelas.

El diputado federal electo de la coalición Fuerza y Corazón por México, exalcalde de Culiacán y exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) era muy influyente.

Era el principal adversario del gobernador Rubén Rocha Moya y supuesto amigo de Ismael El Mayo Zambada, con quien se habría de reunir antes de la captura del capo con traiciones y engaños.

Esa es versión periodística con datos concretos y documentados por periodistas profesionales, pero como crítico del mandatario estatal era un referente para el mal gobierno de Rocha Moya, con quien disputaba el control de la UAS.

Hoy la presidenta del Comité Directivo estatal del PRI en el estado, Paola Gárate, se siente sola.

–Héctor Melesio y yo éramos los únicos críticos del gobernador y me he quedado sola –confiesa a sus amigos.

Será interesante ver el comportamiento siguiente de Paola en una entidad donde el poder político y del dinero están tan concentrados en una persona con respaldo presidencial.

@urenajose1