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Es cuestión de semanas.

O mejor dicho, de agotar las instancias partidistas y judiciales.

Pero dé usted por seguro: el excanciller Marcelo Ebrard, El Carnal Marcelo de Andrés Manuel López Obrador, cuya complicidad sellaron en 2012, ya prepara su salida de Morena.

Solamente reclama el derecho de irse cuando él quiera, no de inmediato como pretende la dirigencia de Mario Delgado y Citlalli Hernández.

Armemos los pedazos de esta historia.

Primera escena:

-Dígame la verdad: ¿Ya negocia con Marcelo Ebrard la candidatura presidencial por MC? -pregunto a su jerarca Dante Delgado.

-Espérese. Ya nada más faltan tres semanas.

-¿Pero sí está en negociaciones?

-Espérese -insiste el senador y exgobernador veracruzano ante un silencioso José Narro Robles-. Usted sabe que yo hago política, no declaraciones políticas. Siempre se lo he dicho.

DE DELFÍN A CRÍTICO

Segunda escena:

El viernes pasado Mario Delgado estuvo en la ciudad de Guadalajara para presidir una reunión del Comité de Morena en Jalisco.

Muchos lo vieron como un acto de apoyo a Claudia Sheinbaum, pero tuvo una segunda característica: Delgado anunció con cierta satisfacción la inminente salida de Marcelo Ebrard.

Traiciones de la política: Ebrard impulsó a Delgado como su potencial sucesor en el GDF en 2012, pero no creció y el favorecido resultó Miguel Mancera.

Tercera escena:

Varios aspirantes marginados de las contiendas gubernativas en nueve entidades han sido buscados por personas cercanas al exsecretario de Relaciones Exteriores.

El objetivo es obvio: atraerlos.

No puede subestimarse: si al menos uno de esos inconformes en cada estado tiene cierto arrastre y se va, abrirá grandes huecos a Morena y por supuesto a la campaña de Sheinbaum.

Cuarta escena:

Un grupo de simpatizantes de Marcelo Ebrard difundió ayer un manifiesto de la organización El camino de México, donde conviven legisladores, autoridades y cuadros morenistas.

Quinta escena:

Pretendían retirar la campaña de espectaculares del libro El camino de México para detener la publicidad de Ebrard, pero el Tribunal Electoral lo consideró trabajo editorial.

Puede verse como dato menor, pero victoria al fin y sin duda útil una vez dada la deserción y sobre todo si opta por MC, como parece.

UNA LUCHA DISPAR

1.- Ayer dábamos un dato oculto en las encuestas.

Claudia Sheinbaum ha alcanzado su máximo nivel en conocimiento y eso puede impedirle incrementar sustancialmente las preferencias electorales para 2024.

En tanto, agregamos, la opositora Xóchitl Gálvez tiene poco nivel de conocimiento -50 por ciento, según ella- y márgenes para difundirse y conquistar voluntades y votos.

Pues bien, ayer circularon en redes sociales las cifras dadas por México Elige, con 50.9 por ciento de tendencia para la exjefa de Gobierno y 40.1 para la senadora.

Con una acotación de los xochilovers: Sheinbaum lleva más de dos años en campaña -exactamente 27 meses- en tanto Gálvez inició en junio pasado, hace cuatro meses.

Y 2.- Ya saltó el otrora perredista y hoy morenista Humberto Morgan para alcalde de Álvaro Obregón.

Chavo banda en su juventud, ya gobernó esa jurisdicción y cuenta con base social para competir.