Existe una clara conversación entre los millones de gentes que no están de acuerdo con el gobierno del presidente de la República. ¿Cómo podemos ganar la cámara de diputados para expulsar la mayoría que actualmente tiene Morena?
Se habla de coaliciones de todos los partidos que no están aliados con Morena, se habla de que cómo es posible que el PAN y el PRI se unen para formar el PRIAN, que ha sido tan demonizando por el presidente de la República y tan odiado por millones de mexicanos.
Mucha gente se siente decepcionada de los partidos políticos que nada más quieren permanecer en sus pequeños cotos de poder de sus grupos dominantes en las dirigencias de los mismos y reciclar a sus eternos candidatos. Se habla del desprestigio de los candidatos independientes y de lo impráctico que es postular a candidatos independientes. Muchos otros obstáculos se enuncian. Éste es el gran enigma que actualmente tiene la oposición.
Todo lo anterior sucede, mientras suben las preferencias en las encuestas en favor del presidente, se dice, que a raíz del tema de Lozoya Austin. Pero, por el otro lado, cada vez más, los números de la pandemia no se espeluznan, y la caída económica se ve como una presa a punto de reventar estando el pueblo inmediatamente abajo de su cortina para ser ahogado en el caos y la desesperación.
¿Cómo podemos despejar este gran enigma de la oposición? Me atrevo a proponer una posible solución, misma que es compartida cada día por más personas que conozco.
Me explico: lo importante en estas elecciones, repito, sin menoscabar las elecciones a las gubernaturas, congresos locales y ayuntamientos, que sucederán todas en el año de 2021, es ganar 251 distritos electorales por parte de partidos que no sean Morena ni sus aliados. Esto se puede obtener con relativa facilidad si logramos el siguiente objetivo: que la inmensa mayoría de la gente vote en cada distrito por un solo candidato de la oposición y no se diluyan los votos por diversos candidatos de la oposición.
Para poder lograr esto es necesario que haya un gran acuerdo nacional ciudadano, mediante el cual el día 21 de mayo de 2021, todo mundo esté de acuerdo en votar, ya sea por el candidato de la oposición que vaya en primero o en segundo lugar en las encuestas, sin importar a qué partido pertenece.
Con lo anterior, se puede lograr el objetivo planteado, sin necesidad de que exista un PRIAN o un BOA o cualquiera otra entelequia que se les ocurra a los partidos políticos dentro de su confusión interminable.
Así, lo ciudadanos de México, sean partidistas o no partidistas, darán la solución al enigma de la oposición: que haya un solo candidato que obtenga todas los votos de la oposición frente a Morena y sus aliados.
No quiero ni siquiera imaginarme la tragedia nacional qué sucederá si Morena ratifica su mayoría en la Cámara de Diputados el 6 de junio de 2021. Entonces el presidente se quedará corto en sus ocurrencias y le echará toda la carne al asador para quedar como El Tercer Imperio de México, comandado por el Emperador López (¿recuerdan a López de Santana?).
Con esto, el presidente podrá hacer reformas constitucionales que lo mantengan en el poder o a su partido y sus seguidores que, estoy seguro, serán los más radicales, para hacer una transformación hacia la condena de México por muchos años a seguir.
No permitamos que esto suceda. Así que la fórmula es, el 21 de mayo de 2021, todos votamos por el primero o segundo lugar en las encuestas, candidato postulado por la oposición a Morena y a sus aliados, provenga del partido que provenga.
Así el pueblo tomará la decisión de expulsar a la tiranía de México para siempre.