* ASEGURA QUE “EL 50 POR CIENTO DE INTENCIÓN DE VOTO POR AMLO NO EXISTE; SE TRATA DE SÓLO UN 12.5 POR CIENTO EN UN ESCRUTINIO, DONDE EL 75 POR CIENTO DE LOS ENCUESTADOS NO RESPONDE. UN DISPARATE ABSOLUTO”, DICE.
Exactamente el mismo modelo que empleó Enrique Peña Nieto en su camino a la presidencia en 2012, lo están utilizando desde hace más de dos años, los estrategas propagandísticos de Andrés Manuel López Obrador, el candidato de Morena, quien ha fracasado en sus 2 anteriores intentos.
Sus operadores ni siquiera se molestaron en variar ni un milímetro esta fórmula. Aturdir con el “bluff” de la supuesta enorme ventaja en las encuestas –aunque esta vez no tengan un respaldo concreto ni sustento que las avale ante el electorado, más que “la apabullante ventaja” mediática–, al parecer les ha dado excelentes resultados.
Por ello, este martes, el experto consultor electoral, Luis Costa Bonino doctor en Ciencia Política del Instituto de Estudios Políticos de la Universidad de Paris, mediante una serie de twitters que circularon profusamente a través de las redes sociales, aseguró:
“Las encuestas en México tienen una inmensa tasa de rechazo y no respuesta. Un 75 por ciento en el caso de “El Financiero”. Y el 25 por ciento que sí contesta, es el más participativo y militante, donde tiene mayoría López Obrador. Hoy sólo son un instrumento de desinformación y propaganda.
El “voto efectivo”, es una gigantesca manipulación informativa. La encuesta de “El Financiero”, que atribuye 50 por ciento de intención de voto a López Obrador tiene un 75 por ciento de rechazo o no contesta, es decir que la intención de voto expresada es la mitad de ese 25 por ciento restante: sólo un 12.5 por ciento.
Costa Bonino –por si usted no lo recuerda o no lo sabe–, es el director de LCB–Marketing, la mayor agencia internacional de consultoría política, con más de 20 años de experiencia. Realiza campañas electorales en toda América y Europa y cuenta con el mayor índice de efectividad. Es la empresa de mayor difusión y actividad en América Latina.
Uruguayo de nacimiento, pero avecindado francés, ha trabajado para François Mitterrand (Francia) y en las campañas de José Alberto Pepe Mujica (Uruguay), Ollanta Humala Tasso (Perú), Andrés Manuel López Obrador (2012) y Emmanuel Macron (Francia). Hoy asesora a Biram Dah Abeid –quien sueña en convertirse en futuro presidente de la República Islamica de Mauritania el próximo año y también a José Antonio Meade, candidato de la coalición Todos por México, si tomamos en consideración los recientes comentarios del periodista Raymundo Riva Palacio.
Una larga charla de Costa Bonino con Alejandro Rodríguez Ayala, directivo de la revista C&E (Campaigns and Elections) puede leerse completa en la dirección de Internet https://www.campaignsandelectionsla.com/single–post/LUIS–COSTA–BONINO
Rodríguez Ayala aclara de antemano que su entrevistado “es uno de los asesores en contenidos estratégicos de Emmanuel Macron en la pasada elección francesa, sin embargo en México es recordado mediáticamente por haber asesorado parte de la campaña 2012 de Andrés Manuel López Obrador, de la cual salió de manera intempestiva, tras darse a conocer una grabación del cuarto de guerra donde supuestamente se le escucha diciendo que “con un millón de dólares”, el haría presidente a su entonces cliente”.
Lo demás es lo de menos. Y en el interesante trabajo periodístico, que se publicó en C&E en septiembre pasado, este gurú de las campañas políticas, señalaba entonces que “sin duda Andrés sería un posible ganador de las elecciones presidenciales de 2018. Pero también es cierto que 2018 no le ofrece ventajas comparativas muy claras con respecto de 2012 y 2006”, subrayó.
“En esas dos últimas oportunidades, Andrés perdió elecciones que parecían imposibles de perder. Especialmente en 2006, pero también en 2012, un mes antes de la elección”, dijo y agregó:
“Es un lugar común decir que Andrés es su peor enemigo. Pero es la realidad. Tiene gente como César Yáñez, de su mayor confianza, que parece el encargado de asuntos especiales para generar las derrotas. Pero no es fácil postular razonablemente la idea de que hay alguien que le construye sus derrotas en su nariz sin que él lo perciba. Puede ser plausible también la versión psicologista, que supone que existe en AMLO una pulsión interior que lo empuja a perder cuando tiene la elección ganada”.
Y este martes, en sus Twitters –a sólo 23 días de la elección federal más importante de los últimos años–, el célebre consultor expresa tajante que “la manipulación del voto efectivo, que muestra engañosamente un 50 por ciento de intención de voto por AMLO que no existe, que es sólo un 12,5 por ciento en una encuesta donde no responde el 75, ha llevado a Carlos Loret a decir que AMLO tendría 30 millones de votos. Un disparate absoluto”, asegura.
LOS SONDEOS HAN SIDO USADOS COMO INSTRUMENTOS DE DESINFORMACIÓN Y PROPAGANDA POLÍTICA
Sin proponérselo, este razonamiento concuerda mucho con el del Maestro de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM, Luis Ángel Hurtado Razo, autor de los libros “2006: El año del complot” y “2012: Reflexiones sobre el proceso electoral”.
En un ensayo titulado ¿Encuestas o propaganda? La estrategia política, elecciones 2012. (Razón y Palabra, vol. 18, núm. 87, julio–septiembre, 2014) del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, Estado de México, subraya que el uso de las encuestas electorales, jugó un papel importante durante el pasado proceso electoral, al ser un factor de incidencia en la opinión pública de la sociedad mexicana.
En primer lugar, a través de los medios de comunicación “infundió la idea de que Enrique Peña Nieto debía ser el virtual candidato a la Presidencia por parte del Partido Revolucionario Institucional (PRI), para posteriormente posicionar no sólo la percepción, sino también la imagen, de que sería el ganador de la Presidencia de México, ya que, según las casas encuestadoras, fue el líder absoluto de todos los muestreos que se realizaron y no existía impedimento para que fuera vencido, ya que, como bien se dice, los números nunca mienten”.
El académico y periodista menciona que “el punto central estriba en que los sondeos de opinión fueron usados como propaganda política y formaron parte de la estrategia de campaña de la coalición que encabezaba Enrique Peña Nieto” y señala la gran incidencia de la propaganda en la opinión pública “y como ésta, a su vez, busca de manera principal influir en el sector de los indecisos en el caso del terreno electoral”.
“En el caso de EPN, su equipo claramente pretendió ganarse el voto de los indecisos quienes, generalmente constituyen el sector que por lo regular define los resultados en una elección”.
En http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=199531505026 Hurtado Razo explica claramente que “las encuestas electorales jugaron un papel importante durante y antes del proceso electoral. De hecho en él fue cuando más se usaron los sondeos de opinión para medir las preferencias electorales, aunque en esta justa electoral éstas fueron las que más discreparon del resultado final de la contienda electoral”.
Al citar datos del entonces Instituto Federal Electoral –hoy Instituto Nacional Electoral (INE)–, indica que del 12 de abril al 26 de mayo, se publicaron 680 encuestas “lo cual quiere decir que, desde otra perspectiva, se difundían los resultados de 14 encuestas diarias.
“Así, los ciudadanos experimentaron un bombardeo informativo–numérico inusual, el cual apuntaba siempre en el mismo sentido: “Enrique Peña Nieto es el puntero indiscutible y no hay nadie que pueda ganarle”, explica el académico de la FCPyS/UNAM.
En su ensayo, señala que el 3 de junio de 2012, la consejera María Marván Laborde aseguró que las encuestas se habían convertido “en un elemento de propaganda y difusión de datos que no corresponden a la realidad y que los estudios de opinión son usados para decir mentiras; se están utilizando de manera mañosa”.
Al cabo de 6 años, parece que nada ha cambiado. Hoy, empleando el mismo método utilizado por el PRI, las encuestas han sido utilizadas de forma muy astuta por el equipo de Andrés Manuel López Obrador como un eficaz elemento propagandístico. Los estrategas electorales morenistas han copiado muy bien la fórmula.
GRANOS DE CAFÉ
…A partir del pasado lunes, más de 2 mil integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) procedentes de los estados de Chiapas, Guerrero, Michoacán y Oaxaca iniciaron un plantón frente a la Secretaría de Gobernación para exigir “la reanudación de las mesas de diálogo, el fin de la reforma educativa, la reinstalación de 586 profesores cesados por negarse a una evaluación de su desempeño y la liberación de las cuentas bancarias donde se depositan las cuotas y préstamos sindicales”, con la amenaza de continuar su protesta “por tiempo indefinido”, si no se cumplen sus demandas.
El caos ocasionado por los presuntos docentes ha afectado no solo a miles de capitalinos, sino a transportistas, automovilistas y autobuses de pasajeros debido a que los protestantes tomaron las casetas de la Autopista del Sol, en Guerrero, exigiendo una “cooperación voluntaria”, para trasladarse a la Ciudad de México; mientras que en Oaxaca, cerraron el acceso al aeropuerto y a la terminal de autobuses, sin importarles el daño ocasionado por igual a turistas y habitantes de la capital de ese estado.
Las virulentas protestas de la CNTE mueven a suspicacias por los tiempos electorales que vivimos y hacen pensar en que ya han tomado posesión de estas sedes, ante la posibilidad real de un resultado desfavorable en las urnas para quien siempre los ha apoyado.
Por lo menos las declaraciones de José Luis Escobar, integrante de la Sección 7 de Chiapas, así lo dejan intuir, al reiterar el voto de castigo de la Coordinadora a los partidos políticos firmantes del Pacto por México. “Nos queda claro contra quién hay que votar“, afirmó Escobar, quien no descartó que también realicen bloqueos en las carreteras y aeropuertos.
A pesar de que el presidente Enrique Peña Nieto ha dejado en claro que las leyes secundarias de la reforma educativa –la Ley General del Servicio Profesional Docente, la Ley del Instituto de Evaluación, y las modificaciones a la Ley General de Educación– respetan plenamente los derechos y la estabilidad laboral de los docentes, la CNTE se ha opuesto a cada una de ellas y pretenden mantener el estatus de incompetencia que caracteriza a una buena parte de sus integrantes, como ha quedado demostrado en las evaluaciones a las que han sido sometidos…
Pero ese es el camino facilito de estas organizaciones minoritarias y muchas veces delincuenciales que subsisten del chantaje y la extorsión. En Oaxaca, por ejemplo, ya sabemos que muchos auténticos maestros viven bajo la férula de los líderes de la sección 22 de la CNTE, quienes les obligan a asistir a por lo menos el 80 por ciento de sus marchas y plantones, so pena de impedirles que asciendan en el escalafón para poder aspirar a ser directores, inspectores o funcionarios.
Si no existiera esa obediencia obligada, ilegítima, los dirigentes carecerían por completo de apoyo y se vendrían abajo como castillo de naipes.
Con el tiempo, esta organización –y muchas otras más pequeñas que hacen su agosto en espacios más pequeños y por lo tanto son menos visibles–, se han convertido en grupos desestabilizadores que constituyen una abierta amenaza a las libertades ciudadanas de las mayorías, como el derecho a la educación, el derecho de tránsito y el derecho al trabajo…
…¿Quién tiene la razón? ¿Quién dice la verdad? Ese el caso de la hoy exdirectora general de Auditoría Forense de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), Muna Dora Buchahin, quien aseguró que la separación de su cargo fue “injustificada” y sólo es resultado de su investigación –más conocida como “La estafa maestra”–, por supuestas desviaciones millonarias y que involucran a la Sedesol, Sedatu, algunas universidades y a varios proveedores particulares.
La ASF indicó por su parte que la señora Buchahin –quien entregará formalmente su oficina el próximo 21 de junio–, fue separada de su cargo, no como represalia por las auditorías realizadas, sino por haberse aprovechado de su posición como funcionara de la ASF, para otorgarles contratos a varias empresas que preside o de las cuales es socia mayoritaria.
La responsabilidad de su separación del cargo, fue asumida a cabalidad por el auditor de Cumplimiento Financiero en la ASF, Gerardo Lozano Dubernard.
El funcionario aseguró que ello respondió a un “conflicto de interés”, pues Muna Dora Buchahin figura en los equipos directivos de 2 organizaciones que prestaron servicios de capacitación a la ASF y a entidades públicas auditadas por la dependencia federal.
Cabe señalar que los problemas no han dejado de agobiar a la doctora en derecho y licenciada en Educación. A inicios de este año, en Tuxtla Gutiérrez, fue asesinada en el salón “Al Jabal” de su propiedad, la joven Gloria Castellanos Balcázar.
Inicialmente, de manera perversa, trató de atribuirse la posesión del local al exgobernador chiapaneco Pablo Salazar Mendiguchía (2000–2006), quien hoy aspira por un escaño al Senado de la República, bajo la figura de candidato independiente.
Salazar Mendiguchía me precisó luego que la señora Muna Dora Buchaín –quien durante su administración fungió como Contralora General del Estado y Coordinadora General de Comunicación Social–, “no llegó a concluir el período de gobierno conmigo. Actuó muy mal y yo la despedí 2 años antes de que terminara mi administración. Efectivamente, fue mi colaboradora, pero no somos amigos y no sé de ella desde hace por lo menos 12 años”, me aseguró…
…El pasado martes 29 de mayo, en la ciudad de Córdoba, Veracruz, falleció la señora Eleodora Domínguez Rivera, madre de la periodista Ana Cristina Peláez, quien durante muchos años laboró bajo las órdenes de Jacobo Zabludowsky en Televisa. Desde este espacio le hacemos llegar a ella y a toda su familia, nuestra fraterna condolencia por tan lamentable pérdida…Envíe sus comentarios al correo gentesur@hotmail.com