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Estira y afloja

Mañana el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) dará a conocer el fallo de la licitación nacional para la contratación del programa integral de seguros del Tren Interurbano México-Toluca tramo Zinacantepec-Santa Fe para el periodo 2024-2025. Se hicieron cuatro propuestas económicas y entre la más alta y la más baja hay una diferencia de casi 100 millones de pesos.

Será interesante la decisión, sobre todo porque el año pasado en la licitación por el tramo Zinacantepec-Lerma se presentó una situación similar. Las aseguradoras de Banorte e Inbursa cotizaron el seguro en alrededor de 20 millones de pesos más IVA y fueron descalificadas para asignar el contrato a Seguros Ve por Más (así está en el acta, pero el nombre real es Seguros BX+) con una prima de casi 80 millones de pesos; ganó Antonio del Valle y quiere repetir.

En la actual licitación se pusieron muchos candados para la participación y habrá que ver si descalifican a Seguros Sura con su propuesta económica de 78 millones 907 mil pesos, contra 178 millones 222 mil de Seguros Afirme, 154 millones 35 mil de Seguros El Potosí y 162 millones 933 mil pesos de Seguros BX+. Moisés Isaac Herrera, subgerente de Contrataciones de Banobras, tiene la palabra el martes a las 5 de la tarde, aunque puede diferirse la decisión por 20 días.

Como representante del Órgano Interno de Control Específico (OICE) en Banobras asistirá Luis Modesto Cortés por invitación de la convocante “sin prejuzgar la información que se presenta siendo estricta responsabilidad de la convocante cumplir con las disposiciones que regulan su actuar”; el OICE se “reserva la facultad de revisar en cualquier momento la documentación que deriva del procedimiento de contratación”.

Cuarto de junto

Desde la empresa Desarrollos Turísticos LT, Francisco Pérez Lobato, ex integrante de Grupo Gigante Inmobiliario, gestionó un crédito millonario para la construcción de un proyecto residencial en Playa del Carmen que no se ha terminado y está hipotecado. No se sabe nada del crédito ni de los ingresos extras por la venta de los departamentos que se estiman en 200 millones de pesos. Quizá una pequeña pista esté en los gastos personales y depósitos que el susodicho hizo a su cuenta personal y de familiares. Desde el año pasado los compradores están en alerta y preocupados porque los 91 departamentos de la torre no están concluidos y ya presentan daños por humedad, cristales rotos por desastres naturales y trabajos a medias. Pérez Lobato no está localizable desde hace seis meses, y los trabajadores de las áreas de ventas, posventa, arquitectura y construcción declararon no tener responsabilidad alguna; en la desaparición de fondos se suma la Constructora Carsa, la encargada del desarrollo inmobiliario del empresario.

jesus.rangel@milenio.com