Estira y afloja
Sí hay crisis en México. Hay elevación de precios en alimentos, falta inversión, la inseguridad es creciente y escasean las políticas públicas promotoras del desarrollo. La lista es más grande, aunque se quiera ocultar con falsedades, como la presidencial, de que la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) significó que la mitad de los amparos privados en materia eléctrica “en automático quedan improcedentes”.
Los amparos subsisten y los tribunales colegiados tendrán que resolverlos y, en caso extremo, la SCJN en la sala dos. Respecto a la reforma constitucional a discutirse en el Cámara de Diputados hay otra mentira: la oposición (PRI, PAN y PRD) no cayó en la trampa de Morena. Los coaligados no quieren destruir el modelo de mercado eléctrico, sino corregirlo y acelerar la transición energética; Morena quiere destruirlo y restaurar el monopolio de la CFE. Aunque el tema se discuta en lo político e ideológico, las tarifas eléctricas subirán sí o sí por los costos energéticos.
El viernes pasado, Francisco Suárez Dávila, con casi 50 años en el servicio público (fue subsecretario de Hacienda y embajador de México en la OCDE y Canadá, entre otros puestos), dictó el viernes una conferencia magistral en el foro Silva Herzog donde advirtió que a nivel mundial “estamos frente a la mayor crisis del siglo”, y México no puede escapar. “Hay altas probabilidades de que vayamos enfilados a una crisis de fin de sexenio, a un naufragio por carecer de un plan de ruta”, dijo.
La nueva crisis global fue provocada por la pandemia de salud, como la influenza española de 1919; una gran depresión económica, como la de 1929; un estancamiento con inflación con crisis energética como en los 70’s; una crisis fiscal-financiera como en los 80’s, además de problemas geopolíticos por la invasión a Ucrania, la proliferación de autoritarismos y el debilitamiento de las principales democracias como en los 30’s. “Todas nos impactan simultáneamente”.
Remató: “El Capitán se empeña cada día en acercarnos más al naufragio. ¡Su rebaño cercano disfruta algo más de poder, un ascenso burocrático o más dinero, por pocos meses, sufriendo el sello eterno de la ignominia histórica!”
J. Jesús Rangel M.
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