Un testigo narra cómo estuvo el desvanecimiento del presidente Andrés Manuel López Obrador en la base aérea militar de Mérida
A María Elena Álvarez-Buylla Roces se le salían los ojos.
Su rostro, de muchos colores con rojo dominante, escuchaba al secretario de Agricultura y Desarrollo rural, Víctor Manuel Villalobos Arámbula.
Tres cargos en la descarga verbal:
-¡Tú no eres científica!
-Actúas por puro dogmatismo, no en uso de la ciencia.
-¡Engañas al señor Presidente y eso no se vale!
Era el miércoles 13 de marzo, pasadas las cuatro de la tarde, cuando fueron citados miembros del gabinete agropecuario en la oficina de la secretaria de Economía, Raquel Buenrostro.
Era una reunión urgente.
Se acercaba el plazo del 31 de marzo para implementar las medidas restrictivas a fin de impedir la importación de glifosato, el herbicida más usado en el mundo, y tomar una determinación institucional.
Ahí, con varios titulares y funcionarios de alto nivel, deberían ponerse de acuerdo a fin de llevar una decisión en consenso debidamente sustentada a Palacio Nacional.
LOS DOCTRINARIOS
Es un tema de división.
Hay doctrinarios, con el exsecretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales Víctor Manuel Toledo y Álvarez-Buylla al frente, y quienes se apegan a la razón, al pragmatismo y a la ciencia.
En los segundos hay varios: el propio Víctor Manuel Villalobos, el secretario de Salud Jorge Alcocer, la titular de Economía Raquel Buenrostro, el responsable de las finanzas Rogelio Ramírez de la O y para qué seguir con el listado.
Con un problema:
Los primeros, los radicales cual activistas de grupos ambientalistas, influyeron con Andrés Manuel López Obrador para dos decisiones claves: prohibir la importación de glifosato y de maíz modificado genéticamente.
Alguien lo hizo entrar en razón y el 27 de marzo dispuso continuar con el uso de ese bioherbicida en tanto se encuentran sustitutos del producto inventado por Monsanto.
Aquella reunión del 13 de marzo fue el mayor antecedente y por supuesto la total descalificación de quien, palabras del secretario de Agricultura, ni es científica y engaña al Presidente.
Ayer informamos de un sueño imposible: el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt) de María Elena Álvarez-Buylla Roces dice contar con sustitutos.
Con algo también imposible de probar: ha descubierto no uno, sino… ¡nueve fórmulas! según ella ya disponibles en el mercado.
Tan creíbles como su producción de respiradores y vacunas contra el Covid, tarea en la cual ha desperdiciado cuatro años de discursos, promesas incumplidas y recursos mal empleados.
LOS MARGINADOS
1.- En el equipo de Xóchitl Gálvez circuló ayer un dato:
El debate redituó al frente opositor unos 2.5 puntos, lo cual la acercaría a menos de seis de diferencia con la candidata oficial, por su empatía con grupos abandonados por este régimen:
Huérfanos de las víctimas de la violencia, madres de hijos secuestrados, parientes de niños con cáncer, miembros de la comunidad lésbico-gay, enfermos de sida, etcétera.
Ese mundo puede hacer la diferencia si de verdad se capitaliza.
Y 2.- ¿Quién tuvo a su cargo la organización de la gira de Claudia Sheinbaum a la frontera bajacaliforniana?
Consiguió aglutinar a miembros de las diferentes tribus morenistas, petistas y verdes para arropar a su candidata presidencial y eso es mucho, habida cuenta de la confrontación del petista Jaime Bonilla y la gobernadora Marina del Pilar.
Con ese ambiente sí puede organizar un paquete de propuestas a anunciar en su próximo recorrido.
@urenajose1