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De acuerdo con Daily Mail, el histrión fue visto por última vez siendo ayudado a subir a su vehículo desde una silla de ruedas, en Brentwood, California, en noviembre de este año.

Además de su gran trayectoria artística, algo que destacó en su vida fue la problemática relación que tuvo con la madre de Redmond, Farrah Fawcett, y el distanciamiento con sus hijos.

En febrero, una fuente cercana al actor reveló a Radar Online en febrero que el histrión estaba desesperado por volver a conectarse con su hijo Redmond, pues creía que ya no le “quedaba mucho tiempo”.

Con su primera esposa, Joanna Moore, O’Neal procreó a Griffin y a Tatum, ésta última su coestrella en Luna de Papel, con el cual ella sí ganó el Óscar como Actriz de Reparto.

Además, tuvo a Patrick con su segunda esposa, Leigh Taylor-Young.

Con todos sus hijos tuvo numerosas polémicas, problemas de adicciones, arrestos y distanciamientos frecuentes.

En 2001 le diagnosticaron leucemia y cáncer de próstata en 2012. Inicialmente, afirmó que estaba en la etapa 4 de cáncer, antes de aclarar que era la etapa 2. En 2017 se sometió a una cirugía de espalda.

Con talento en la sangre

Nacido como Charles Patrick Ryan O’Neal, en Los Ángeles, fue el hijo de la actriz Patricia Ruth Olga y del novelista y guionista Charles O’Neal.

Antes de inclinarse por la actuación, Ryan entrenó para convertirse en boxeador profesional y compitió en dos campeonatos de los Guantes de Oro en LA, en la década de 1950. Su récord de pelea amateur es de 18 victorias, cuatro derrotas y 13 nocauts.

O’Neal era mejor conocido por sus filmes de la década de los 70, donde se incluye Luna de Papel, la cual protagonizó con su hija Tatum O’Neal.

Trabajó con estrellas femeninas del calibre de Barbra Streisand en What’s Up, Doc y La Pelea Estelar. También actuó junto a Marisa Berenson en Barry Lyndon.

Ryan comenzó su trayectoria en la década de los 60 y obtuvo un gran papel en la serie de televisión Peyton Place, donde encarnaba a Rodney Harrington. Poco tiempo después, Hollywood lo contrató para que actuara en la pantalla grande, gracias a su carisma y apariencia.

Posteriormente, lo recomendaron para el rol principal en el drama romántico Love Story, el cual le valió una nominación en 1970 al Óscar a Mejor Actor. A partir de ahí externó su deseo de nunca regresar a la televisión.

Entre su gran y exitoso repertorio fílmico destacan Love Hate Love, Western Wild Rovers, ambas de 1971; What’s Up, Doc., de 1972; El Ladrón, donde compartió créditos con Jacqueline Bisset y Warren Oates.

La cinta Luna de Papel le valió una nominación al Globo de Oro en la categoría de Mejor Actor en película musical o comedia, y se posicionó como la segunda estrella más popular de 1973.

Las últimas apariciones de Ryan en la pantalla chica fueron en 24 episodios de Bones, que finalizaron en 2017. Su última cinta está en desarrollo, según IMDb, titulada The Waste Lands, que entra en el género de terror.

Con información del  Grupo REFORMA

Foto de la publicación Town&Country