El juez Frederick Block dio 90 días a la Fiscalía de EU para definir si solicita la pena de muerte en contra de Rafael Caro Quintero.
Este miércoles, el fundador del Cártel de Guadalajara compareció ante la Corte Federal del Distrito Este de Nueva York para la audiencia del caso en su contra por tráfico de drogas, así como el secuestro, tortura y asesinato, en 1985 del agente de la DEA, Enrique «Kiki» Camarena.
En la comparecencia de media hora, Caro Quintero o «R1» estuvo resguardado por 5 alguaciles, además de que en la sala había varios elementos de la DEA, mientras que afuera del recinto se encontraban tanto uniformados de la Administración de Control de Drogas (DEA por sus siglas en inglés) y de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI por sus siglas en inglés).
Ante Block, el capo mexicano estuvo representado por la abogada de oficio Elizabeth Macedonio, especializada en casos de pena de muerte.
Tras dar el plazo para definir si se pide la ejecución de Caro Quintero, Block dijo que es un «caso complejo»; la siguiente audiencia fue programada para el 25 de junio, día en que se deberá informar sobre la pena que se solicitará en contra del mexicano, en caso de ser encontrado culpable.
Hoy también se solicitó otra sesión de procedimiento contra Ismael Quintero Arellano, sobrino del capo, el cual estaría negociando con la Justicia estadounidense, un acuerdo de culpabilidad.
El 28 de febrero, en su primera comparecencia ante una Corte de EU, el «narco de narcos» se declaró «no culpable» de los cargos en su contra.
«Después de 40 años, el hombre que asesinó al agente especial de la DEA Enrique Camarena está aquí para hacer frente a la justicia estadounidense», dijo la fiscal Saritha Komatireddy en esa ocasión.
¿De qué se le acusa a Caro Quintero?
Caro Quintero es «responsable de la muerte de muchos estadounidenses», agregó la fiscal. «Él y sus socios fueron pioneros de la industria del narcotráfico mexicana», enfatizó.
Conocido como «narco de los narcos», Caro Quintero llegó con las manos esposadas a la espalda a la sala del tribunal federal de Brooklyn. El narcotraficante de 72 años es considerado por la Casa Blanca como uno de los «jefes de cártel más malvados del mundo».
Antes que él, compareció otro de los narcotraficantes enviados por México la víspera, Vicente Carrillo Fuentes, que también se declaró «no culpable» durante la vista.
En medio de crecientes presiones comerciales de la administración de Donald Trump para que México detenga el tráfico de fentanilo hacia Estados Unidos. Por ello, las autoridades mexicanas mandaron sin el proceso de extradición el jueves a 29 de sus más notorios narcotraficantes a Estados Unidos.
El presidente republicano ha anunciado la imposición de aranceles a las importaciones mexicana a partir del martes.
Estados Unidos acusa al grupo de narcotraficantes de importar al país «cantidades ingentes de veneno», como la cocaína, metanfetaminas, fentanilo y heroína. También enfrentan cargos por crimen organizado, narcotráfico, asesinato, uso ilegal de armas, lavado de dinero y otros actos de violencia.
Las autoridades también evaluarán si los acusarán de terrorismo después de que la administración de Trump designó como terroristas a seis bandas criminales mexicanas. Estas son los cárteles de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación (CJNG), del Noreste (antes los Zetas), del Golfo, la Nueva Familia Michoacana y Cárteles Unidos.
El departamento de Justicia estadounidense evalúa si Caro Quintero y otros 4 de los trasladados desde México los condenen a muerte.
Con información del periódico 24 Horas, El Diario Sin Límites