COMPARTIR

Loading

Estira y afloja

Cada semana la Casa Blanca publica un resumen de las “victorias” del presidente Donald Trump por la aplicación de cambios en su administración y el renacimiento de Made in America. Ahí da a conocer nuevas inversiones o proyectos de mayor producción por parte de empresas estadunidenses o de capital extranjero.

Algunos ejemplos: Hyundai invertirá 21 mil millones de dólares en EU entre 2025 y 2028; General Motors aumentará la producción de camiones en Indiana; el gigante de equipos JCB duplicará su nueva planta de fabricación en EU; Schneider Electric invertirá 700 millones de dólares durante los próximos cuatro años; se prevé que Rolls-Royce traslade su producción a EU.

Alex Irwin-Hunt, de fDi Intelligence de Financial Times, utiliza el rastreador IED Trump para afirmar que EU disminuyó aún más como fuente de inversión extranjera directa mundial bajo Trump 2.0 mientras China y sus empresas se “globalizan como nunca”. En los dos primeros meses del año la “proporción de proyectos de IED greenfield entrantes y salientes de EU se situó en 45 por ciento, un máximo histórico y superior al 42.7 por ciento de todo 2024, mientras China registró una caída a un mínimo histórico de 25 por ciento, por lo que pasó de ser un importador a un exportador de capital.

La política arancelaria implementada por Trump sí está obligando a muchas empresas a expandir o establecer operaciones en Estados Unidos para evitar costos. En los dos primeros meses del año, según datos preliminares de fDi Markets, se anunciaron en EU unos 326 proyectos de IED totalmente nuevos valorados en más de 38 mil millones de dólares.

La Casa Blanca presumió que TSMC prometió invertir otros 100 mil millones de dólares en el país, que una encuesta global de 500+ ejecutivos de negocios apuntaron que EU atraerá más IED que cualquier otro país hasta 2027; que China retrasa la aprobación de la planta de BYD en México por posibles fugas de tecnología a EU; que el gigante naviero francés CMA CGM invertirá 20 mil millones de dólares en EU durante los próximos cuatro años, y que Apple gastará 500 mil millones de dólares en EU incluida la IA, durante los próximos cuatro años.

Lo que se ve es que las dos grandes potencias juegan diferente: EU busca su fortalecimiento con inversión interna, y China su expansión con inversión externa. Cobra importancia lo dicho por Ngozi Okonjo-Iweala, directora general de la OMC, de que “es especialmente preocupante la posible fragmentación del comercio mundial en función de criterios geopolíticos. Una división de la economía mundial en dos bloques puede conducir a una reducción a largo plazo del PIB real global de casi el 7 por ciento”. EU quiere doblar al gigante chino con su renacimiento y China busca expandirse en Europa y Latinoamérica. Esta columna descansa y regresa el 21.

jesus.rangel@milenio.com

Las opiniones expresadas por los columnistas son independientes y no reflejan necesariamente el punto de vista de LINEAPOLITICA