Es verdaderamente de llamar la atención la voracidad que demuestran los militantes de morena y partidos aliados, para obtener mayores posiciones dentro del Congreso de la Unión, esto con el objetivo de demostrar que nada puede hacer el cambio en el pensamiento de muchos mexicanos acostumbrados a solo recibir, pequeñas cantidades de dinero, en forma de programas sociales, sin observar que en nada los apoyan para salir de su precariedad económica.
En 2018, la ciudadanía eligió el cambio cansada de los altos niveles de inseguridad y la corrupción que se habían gestado desde el sexenio de Felipe Calderón, sin embargo, a pesar de que estos problemas, inseguridad y corrupción se acentuaron en este sexenio, el autollamado de la 4T, y a esto se sumo la destrucción de los sistemas de salud y educación, además de la ocupación de una tercera parte del territorio por organizaciones del crimen organizado, que ahora se posicionan para decidir candidatos y gobernantes en casi toda la republica, y esto quedó demostrado ante los homicidios y amenazas que sufrieron muchos candidatos, aun siendo de Morena y partidos aliados, para dejar de competir en los comicios electorales, la gente voto por la continuidad de este régimen.
Ante esto, los partidos de la coalición Seguiremos Haciendo Historia, pretenden revivir la época del parido omnipotente, considerando que ellos obtendrían la mayoría absoluta en el Congreso de la Unión. Pero esto, de entrada, violenta a la misma Constitución Política Mexicana y las refdorams aprobadas en 1996 en lo federal y 2014 en lo local, que impide que exista una representación por encima del 8 por ciento por cada fuerza política en el Congreso federal o locales.
Y aun cuando la Secretaria de Gobernación, Luisa Maria Alcalde haya señalado la distribución probable del número de curul en Cámara de Diputados y Senado de la República, algo que de entrada no le corresponde, esto no puede ser posible. Por eso la importancia de la revisión de las actas electorales, para dejar en claro el numero que le corresponde a cada fuerza política.
Cunado se 3xcede ese porcentaje de representación es una violación a Constitución. Entonces la alianza Seguiremos Haciendo Historia, a no ser que en el transcurso del tiempo algunos legisladores de cualquier otra fuerza política se sumen a cualquiera de las bancadas de Morena, PT y PVEM.
Esto ultimo, deberá ser reclamado por los ciudadanos que votaron por diputados y senadores como sus representantes y que lo hicieron bajo la basa en la plataforma política que se presentó y no que le conviene al legislador.
Ahora es el momento que el INE, y el Tribunal Electoral, ocupen su autonomía para hacer valer las leyes y evitar que el partido omnipotente se reavive, disfrazado de una coalición, que en el corto plazo, podría hacerle mas daño al país, del que hasta ahora Morena y aliados le han hecho.