“Cuando la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación realizó su plantón, la oposición demandó al entonces presidente de la Mesa Directiva, el Diputado Porfirio Muñoz Ledo, garantías para que la Cámara de Diputados pudiera hacer su trabajo y tanto el Ejecutivo Federal como la Jefa de Gobierno, se negaron a establecer mínimas condiciones de seguridad para las diputadas, los diputados, las y los trabajadores”, recordó la líder del PRD en San Lázaro, Verónica Juárez Piña.
Cuando inició el cerco de las organizaciones campesinas, se pidió desde un principio garantías de seguridad y de libre tránsito para que las y los legisladores pudieran hacer su trabajo y tampoco hubo respuesta, lamentó.
“Ahora, como se trata del presidente, entonces sí se usó la fuerza pública para evitar que las organizaciones campesinas acudieran al desfile del 20 de Noviembre y pudieran molestar a Andrés Manuel. De tal manera que es claro que el presidente define cuándo sí y cuándo no utilizar la fuerza pública y que lo hace a conveniencia y a partir de sus intereses”, denunció.
Repudió además el trato que se le dió al presidente municipal de Tultepec, Estado de México, Armando Portuguez Fuentes, quien organizó, junto con otros ediles, un plantón en San Lázaro en demanda de mayor presupuesto para municipios.
Denunció que en esta estrategia de presión, el presidente municipal, del PRD, prácticamente fue expulsado de la CDMX por dos patrullas, mientras que los habitantes de ese municipio que estaban en el plantón fueron encapsulados por un cerco policiaco.
De tal manera que los abrazos, no balazos, son para los aliados del presidente; y para los opositores y los contrapesos institucionales es el desgaste y la presión”, alertó.
Denunció que toda esta estrategia de no garantizar el trabajo de la Cámara de Diputados, en el fondo lo que busca es desgastar al Congreso de la Unión, de responsabilizarlo de no sacar adelante el Presupuesto 2020, cuando quien se ha negado a atender las demandas de mayor presupuesto para diversas áreas prioritarias como el campo, la salud, la educación, la seguridad, entre otras, ha sido la mayoría de Morena, en afán de atender la instrucciones presidenciales. Consideró que hay demandas legítimas entre los manifestantes que deben ser atendidas y que, al contrario, la mayoría morenista sigue priorizando los programas del presidente.
Es decir, “el responsable de todo este conflicto es el presidente porque se aferra a sacar un presupuesto con claros fines clientelares y no uno que fortalezca la economía del país, invierta en obra pública, genere empleos, garantice los servicios públicos y los derechos de las y los mexicanos y que verdaderamente combata la desigualdad y la pobreza”, apuntó.