Todos están en campaña.
El núcleo cerrado de Xóchitl Gálvez se distingue por militantes panistas de larga carrera y cuyo pasado estuvo marcado por su lucha contra el partido en el poder, el PRI.
En cambio, la oficialista Claudia Sheinbaum se apoya en un ejército de tránsfugas del priismo cuya militancia tricolor terminó cuando ya no tuvieron candidaturas o cargos públicos.
Son multitud.
Si el Frente Democrático Nacional (FDN) nació de una disidencia en 1988 con Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo y luego se convirtió en partido, la fórmula creció con más desprendimientos de la agrupación gobernante.
A ellos se han sumado en fechas recientes quienes no encontraron acomodo en la coalición Fuerza y Corazón por México: Eruviel Ávila, Alejandro Murat, Jorge Carlos Ramírez Marín, Adrián Rubalcava y muchos más.
Son los más fervientes defensores del oficialismo y de su abanderada y por supuesto rabiosos atacantes de la oposición al estilo de Arturo Zaldívar, quien llegó a la Corte por su amistad con Felipe Calderón.
Ahora hasta de él reniega.
LOS PANISTAS AL MANDO
No tienen el mismo signo los panistas en campaña con Xóchitl Gálvez.
Ellos militaban en el PAN cuando el adversario político eran el PRI y los gobiernos surgidos de él, pero las circunstancias han cambiado con la administración de López Obrador.
Panistas, priistas y perredistas lo ven como peligro y por eso se han coaligado a fin de competirle por el poder presidencial, pero sobre todo para ponerle un dique desde el Poder Legislativo.
Aquí el tema es otro: en el entorno de Xóchitl Gálvez no hay muchos priistas e inclusive han sido desplazados quienes en un principio fueron llamados para tareas importantes, como el exsecretario de Hacienda José Ángel Gurría.
Tienen funciones más trascendentes, para bien o para mal, el coordinador Santiago Creel, el exvocero calderonista Maximiliano Cortázar, la senadora Kenia López Rabadán y Juan Pardiñas.
En las oficinas de la hidalguense han perdido influencia los priistas y quien es más frecuente, Enrique de la Madrid, no tiene plenas facultades para foros y proyectos de gobierno, como era su misión.
ESCRITURAS Y ELECTORES
1.- Hoy es un día de fiesta para muchos acapulqueños.
Han sido citados este jueves para recibir escrituras de sus casas, la mayoría perdidas durante el huracán Otis de octubre pasado.
Loable acción si no tuviera otros elementos: se entregan en tiempos de campaña y en víspera de mítines de la candidata oficial Claudia Sheinbaum promovidos con un slogan sugerente: Guerrero es como el corazón de la cuarta transformación.
También estará por allá Xóchitl Gálvez, pero ella se rodeará de espontáneos.
2.- A propósito de Guerrero, el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública reporta reducción de actos delictivos.
Según sus datos, el estado de Evelyn Salgado ya cayó al octavo lugar en homicidios dolosos en el primer bimestre y 39.8 por ciento en Acapulco.
Y 3.- El exdirigente de Panal, Luis Castro, participó en Madrid en el seminario Las elecciones que vienen. México 2024, organizado por la Fundación Ortega y Gasset.
A su juicio, es oportunidad de fortalecer la democracia y la clave es la participación ciudadana, tanto para encauzar el proceso por la vía institucional como si se judicializan algunos casos.
@urenajose1