El Senado de la República reconoció los 28 años de trayectoria de “Los Patita de Perro”, el grupo de rock para niños, que se ha distinguido por promover en sus canciones los derechos de los infantes, el cuidado del medioambiente y temas de interés social que invitan a la reflexión sobre la tolerancia, la inclusión y la libertad de expresión.
A la entrega del reconocimiento asistió el presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal Ávila, quien destacó que, a diferencia de otros músicos que le cantan al público infantil, esta banda sobresale por sus letras alejadas de la fantasía.
Desde sus inicios, Nacho, Pancho y Charly han escrito más de cien canciones, incluidas en 10 discos, que tratan los problemas cotidianos que enfrentan los pequeños, como el cuidado del planeta, la comida chatarra, las relaciones entre padres e hijos o las experiencias infantiles y de la adolescencia.
Este evento no es casual, acotó Monreal Ávila, pues en la Cámara de Senadores se construyen las leyes e instrumentos internacionales, y se debaten asuntos públicos, “pero pocas ocasiones les ofrecemos homenaje a quienes lo merecen”.
“Aquí están reunidos todos los partidos, pensamientos políticos y filosofías de carácter público; y hoy todos hemos estado reunidos para felicitarlos. Nacho, Charly, Pancho, deben de sentirse muy orgullosos porque unen a todos, a todos los partidos, a todos los mexicanos, a todas las mexicanas”.
La presidenta de la Comisión de Cultura, Susana Harp Iturribarría, destacó que “Los Patita de Perro” reconocen la inteligencia de las y los niños, con un lenguaje sencillo y cercano, sin hacer uso de estímulos externos.
Nacho Pata, Pancho Pata y Charly Pata llevan 28 años de carrera, componiendo canciones ingeniosas e hilarantes, pero, sobre todo, acercan a las niñas y niños a esta música maravillosa, explicándoles cosas que a veces no entienden del mundo de los adultos.
“Los Patita”, como muchos niños les dicen de cariño, han acompañado a varias generaciones promoviendo la tolerancia, el conocimiento de los derechos de los menores, con una visión crítica, y con la libertad de pensamiento y su propia expresión.
Este trío de irreverentes, originarios de Puebla, agregó la senadora, tienen 10 discos y más de 100 canciones, que han presentado en diferentes festivales como el Cervantino o el Vive Latino, y en otros países como Francia, Estados Unidos, Canadá, Argentina, Chile y Colombia.
La senadora Nancy de la Sierra Arámburo, del Grupo Plural, destacó que “Los Pata” no sólo son reconocidos en México, sino a nivel internacional, y eso le da una diversidad intercultural al rock mexicano, pero también nos ayuda a mantener la esperanza de un mundo en paz, a través de la música.
Se trata, agregó, de una de las agrupaciones musicales para niños más importantes de México, con una trayectoria ininterrumpida de casi tres décadas, de trabajo musical y literario independiente, que ha llenado de originalidad, objetividad y puesto en el centro de la música los derechos de la infancia y de la niñez.
¿Para qué sirven los artistas?, se cuestionó Charly Pata. “En términos prácticos, no servimos para nada. Si alguien se enferma o si a alguien se le descompone su auto o si tiene un problema legal llama a un abogado, llama a un mecánico, pero nunca llama un artista. “No podríamos arreglar una plancha ni resolver un problema de crédito bancario”.
“Nuestra única función en esta vida y para lo que hemos llegado a este planeta es para tocar los corazones y los pensamientos de la gente. Somos capaces de hacer reír, de hacer llorar, de hacer pensar o de disfrutar a alguien sin siquiera tocarlo”.
El arte, agregó el músico, es capaz de transformar tu vida. “No sabemos qué tan necesarios seamos, pero lo que sí sabemos es que la vida sería muy distinta sin nosotros, tal vez un poco más aburrida, un poco más autómata, un poco más gris”.
Nacho Pata agregó que este reconocimiento no sólo es para “Los Patita de Perro”, sino para todos los artistas y músicos para niños, que somos muchos y hemos resistido con amor, talento, cultura, entrega y con todo el esfuerzo para llevar nuestra música y formas de pensar a los niños de nuestro país, a contracorriente de la avasallante oferta comercial que educa a los menores.
Señaló que en muchos festivales de los jardines de niños o en las escuelas primarias, los y las maestras amenizan sus eventos con reggaetón, al igual que en muchos hogares, lo que sexualiza a las niñas desde pequeñas y promueve el machismo en los niños. “Estamos seguros de que no lo hacen de mala fe, sino por el desconocimiento de que existe otra música para niños, constructiva, alternativa, de paz, hecha por músicos mexicanos”.
Dijo que el grado de civilización y avance de un país se mide en cómo trata a sus niños, a sus abuelos y a las personas más vulnerables. Por eso creemos que países como Noruega, Japón o Cuba ponen tanto empeño en sus infancias, y México, ahora ejemplo para el mundo en muchas cosas, debe tener como eje rector de su política nacional a sus niños.