A dos semanas de la jornada electoral, “la Iglesia Católica ha asumido con determinación su papel cívico y su obligación democrática, impulsando campañas para alentar a los ciudadanos a participar en las elecciones” y para que acudan a las casillas a emitir su voto, aseveró la Arquidiócesis Primada de México.
En el editorial del semanario católico Desde la fe, sostuvo que un periodo de campañas plagado de agresiones y descalificaciones puede influir significativamente en el comportamiento de los seguidores de quienes aspiran a dirigir los destinos de México, “lo que puede traducirse en un ambiente electoral tenso y violento”.
Agregó que el “tiempo para que los candidatos conquisten la simpatía del votante se agota” y se observa “con preocupación “el aumento de la tensión política y la polarización social”.
Dijo que el periodo de las campañas electorales “se transforma en escenarios de confrontaciones personales y descalificaciones, se desvirtúa su propósito y se incrementa la polarización. Así, un ambiente de hostilidad no solo desanima a los votantes, sino que también socava la confianza en el proceso electoral”.
Mencionó que un proceso respetuoso y fundamentado en las campañas, puede fomentar un clima de paz y cordialidad, donde las diferencias se discuten de manera civilizada y se respetan las opiniones de los participantes.
Destacó que otro elemento fundamental del proceso electoral en curso es la participación cívica, ya que “los ciudadanos no solo tienen el derecho, sino el deber de informarse y participar de manera activa y consciente. Para que esto sea posible se necesita de un ambiente seguro, libre de intimidaciones y de violencia”. Confió en que la jornada electoral del 2 de junio se desarrolle de manera pacífica y democrática.
Con información del periódico La Jornada