>> “Mujeres que estamos afuera acompañamos a la población femenina olvidada y sin visibilidad que está en las cárceles”: Vanessa Coppel.
>> Este proyecto ya está implementado en 10 estados del país, favoreciendo al 30% de la población penitenciaria femenina.
La Fundación Plan B, presentó el proyecto Videoacademia Penitenciaria de México, escuela en línea que fue diseñada especialmente para mujeres privadas de su libertad y desde la cárcel pueden cambiar su concepción de ellas mismas y de la violencia.
La Videoacademia, impulsada por las activistas y docentes Tatiana Ortiz Monasterio y Vanessa Coppel, desde hace cuatro años imparte clases semanales vía zoom, de manera simultánea en 23 penales femeniles de 10 estados del país, lo que ha permitido la capacitación de 30 por ciento de la población penitenciaria femenil.
Ortiz Monasterio resaltó que con este proyecto se beneficia a 12,410 reclusas que están en los diversos penales estatales y que se espera que, en 2026, se implemente el programa al 100 por ciento.
“Es importante que como sociedad civil entendamos que las cárceles no son el último eslabón de la seguridad, pueden ser el inicio y es tarea de todos abordar el tema de reinserción social”, aseguró Tatiana Ortiz, cofundadora de Plan B. Explicó que “se imparten 12 horas de clase a la semana y hemos tenido un éxito rotundo, ya que tanto para las que estamos afuera sirviendo y acompañando a esta población olvidada y sin visibilidad alguna, hemos logrado consolidar a un gran grupo de mujeres que están dentro estudiando juntas”.
Subrayó “Nos dimos cuenta que no solo debíamos ofrecer trabajo en la cárcel, sino llevar conocimiento, porque hay una necesidad de las mujeres de obtener conocimiento y llevarlo a la gente que no ha tenido las herramientas necesarias en las circunstancias necesarias”.
Los cursos y talleres que se imparten buscan brindar contenido que transforme la vida de cada una de estas mujeres y darles una segunda oportunidad de restaurar la dignidad y lograr una verdadera reinserción social al salir de la cárcel, pues ha quedado demostrado ser más difícil para las personas privadas de libertad ya que en muchos casos, siguen prisioneras del estigma social que les impide vivir la vida cotidiana.
Al hablar del contenido de la Videoacademia Penitenciaria de México, resaltó que se ha avanzado a pasos agigantados, gracias a los contenidos que tienen un programa semanal sumamente atractivo. Los lunes se imparten clases de meditación, yoga y herbolaria; los martes se ofrece un taller de emprendimiento; los miércoles hay clases de historia del arte, así como de redacción y escritura creativa, y por la tarde tenemos un taller de lectura; los jueves hay talleres de revaluación y recuperación emocional y los viernes son de movimiento con baile y ejercicio, para cerrar la semana.
Vanessa Coppel comentó que este programa inició como un sueño, pero era necesario desarrollar una estrategia para materializar el proyecto. Añadió, “lo que estamos tratando de lograr no se puede sin la ayuda de la gente. Necesitamos conciencia en cuanto a qué es una escuela virtual dentro de los penales. Cuesta mucho trabajo establecerlo”.
Estados como Oaxaca, Querétaro, Jalisco, Estado de México, Nuevo León, Guanajuato, Quintana Roo, Chihuahua han sido beneficiados por el programa, que pretende la reinserción social y brindar a las mujeres una ventana al mundo del conocimiento.
Vanessa agregó que “se puede entrar en un entorno erosionado y sanar, y eso se convierte en la base de este proyecto. El objetivo era comunicarles una idea muy precisa, de saber que no son gente mala, sino gente buena, nadie entendemos que nos pasó hasta que lo trabajamos y sanamos”.
Iniciativas como Videoacademia Penitenciaria de México, favorecen al tejido social y, sobre todo, al futuro de estas mujeres, pues les brinda herramientas para ser ellas mismas las voceras en la prevención de la delincuencia y la violencia.