En esta entrega les presento a mis amables lectores breves de las múltiples problemáticas existentes en el país, que demuestra que México está inmerso en una profunda crisis de salud, económica y política:
Covid-19.– Su manejo gubernamental es un desastre. No hay pruebas, damos palos de ciego. No hay presupuesto suficiente para la salud. El presidente ha mostrado desprecio por el gremio médico. Su manejo es político. El pueblo no tiene confianza. Vamos hacia un gran rebrote.
Economía. El gobierno no aplica recursos para apoyar a las empresas que generan empleos. Al quebrar las empresas, cuya mayoría son minis, habrá desempleo masivo y presión social que puede manipularse políticamente por el Régimen (véase Jalisco). Se está generando una fabrica de pobres, que apoyan al presidente (como anillo al dedo).
Deuda Pública. El presidente cantinflea diciendo que es “un asunto de rutina” (el préstamo de Banco Mundial por 1,000 millones de dólares), pero que no aumenta la deuda Publica. En el primer trimestre de 2019 se contrajo nueva deuda por 9,500 millones de dólares (datos de Banco de México). No entendí.
Ahorro. Hoy 8 de junio de 2020, dijo el presidente en la mañanera, que iba a ahorrar $500,000 millones de pesos. ¿No creen que los debería de aplicar a salvar a las microempresas para no perder los empleos?
Obra Pública. El presidente insiste en Santa Lucía, para crear una especie de sistema aéreo metropolitano. Los expertos en aeronáutica dicen que no funcionará. El presidente insiste en construir una refinería nueva en Dos Bocas, Tabasco. Los expertos en hidrocarburos dicen que es tirar el dinero a la calle en el entorno energético en que se encuentra el mundo. El presidente insiste en construir el Tren Maya, cuando todos los sistemas ferroviarios del mundo pierden dinero y tienen que ser subsidiados, por lo que dicha “inversión” solo generará gastos interminables en un área que no tiene industria más que el turismo en las playas.
Control Legislativo. El sistema de control de balance de poder público que se diseñó en EE.UU., inspirados por los postulados de los precursores de la Revolución Francesa, de tener a tres poderes, Ejecutivo, Legislativo y Judicial, parte de la base de que el Legislativo en la Cámara de Diputados representa al pueblo. En México, como en otros países del mundo, no se ha dado eso cabalmente, por eso es necesario recuperar en el 2021 a la Cámara de Diputados, para que ellos representen al pueblo, controlando el presupuesto y al órgano de revisión de la cuenta pública, la Auditoría Superior de la Federación, un verdadero freno al presidente.
Bien Común. El presidente ganó la elección con amplia mayoría porque prometió respetar el Estado de Derecho, combatir la corrupción, gobernar para los pobres como prioridad. Esto, en términos generales, es dar bien común; es decir, que el gobierno nos ponga los elementos necesarios para el desarrollo que queremos como personas. Que nos de seguridad y justicia, servicios públicos, salud, educación y vivienda. El presidente no ha cumplido, siguen los altos niveles de inseguridad. Además, quiere ser petrolero, andar de grilla con los maestros, gobernar por decreto sin respetar el Estado de Derecho, no combate la corrupción y ha establecido la mejor fábrica de pobres al no apoyar a la economía aplicando recursos públicos a salvar la existencia de las microempresas. No apoya a la salud al no aplicar las pruebas debidas y engañarnos con los datos de la pandemia.
Elecciones Primarias en Chihuahua
En mi estado de Chihuahua, el gobernador Corral pretende presentar una iniciativa que permitirá empoderar a los ciudadanos para elegir a los candidatos del partido de su preferencia, aplicable obligatoriamente a todos los partidos políticos, haciendo elecciones primarias en un mismo día. Los panistas de base se oponen a ella. ¿Es decir, quieren que las mafias partidistas continúen mandando? No entendí.