< Con precios más asequibles a la población se incentivará la lectura y de esta manera se fomentará el conocimiento y la cultura en nuestro país, señaló
< Entre 2019 y 2023, la producción editorial mostró tendencias contrastantes. En 2023, se registraron 23 mil 039 títulos, un incremento del 20% respecto a 2022, pero la producción de ejemplares cayó un 23.6%, situándose en 79.5 millones de piezas
Al considerar que los índices de lectura en México son bajos y que resulta esencial que las políticas públicas se orienten a promover el acceso al conocimiento, reducir las desigualdades en el consumo cultural y ajustar el sistema tributario a las nuevas realidades tecnológicas, el Grupo Parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados presentará una iniciativa que reforma el último párrafo y adiciona una fracción IX al Artículo 151 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta para lograr este objetivo.
A través del coordinador económico del GPPAN, Dip. Héctor Saúl Téllez Hernández, la iniciativa pretende incentivar la adquisición de libros a personas físicas a precios más asequibles y de esta manera fomentar el conocimiento y la cultura en nuestro país; toda vez que una población lectora está mejor equipada para participar activamente en la sociedad, comprender su entorno y tomar decisiones informadas.
“Estudios han demostrado una correlación positiva entre los niveles de lectura y el desarrollo económico y social de los países ([Fuente: UNESCO, «Reading in the Mobile Era», 2014]). Un acceso más amplio a los libros, facilitado por precios accesibles, puede contribuir significativamente a mejorar los indicadores educativos y de desarrollo humano en México”, explicó el legislador panista.
Téllez Hernández precisó que las editoriales mexicanas juegan un papel crucial en la preservación y difusión de la cultura, la historia y la literatura del país; publican obras de autores nacionales, rescatan textos clásicos y promueven la diversidad de voces y perspectivas, por lo tanto, dijo, un sector editorial fuerte y vibrante contribuye a fortalecer la identidad nacional y el patrimonio cultural.
Expuso que, durante los últimos años, la industria editorial ha registrado contrastes interesantes, debido a la pandemia de Covid 19 que provocó el cierre de librerías y las restricciones de movilidad; y aunque en 2021 se observó una recuperación, en 2023 las ventas cayeron.
“Entre 2019 y 2023, la producción editorial mostró tendencias contrastantes. En 2023, se registraron 23 mil 039 títulos, un incremento del 20% respecto a 2022, pero la producción de ejemplares cayó un 23.6%, situándose en 79.5 millones de piezas. Esta disminución se atribuye principalmente a la reducción del 77% en la producción de libros de texto para secundaria destinados a programas gubernamentales”, dijo.
Agregó que, en 2023, el precio promedio de un libro alcanzó los 128.9 pesos, lo que representa un aumento de 21 pesos en comparación con el año anterior. Esto se debe principalmente al incremento en el costo de las ediciones nacionales, que pasaron de 91.5 pesos en 2022 a 113.3 pesos en 2023. Como resultado, adquirir un libro se ha vuelto más costoso para las personas, lo que puede desincentivar tanto la lectura como el acceso al conocimiento.
Por ello, resaltó la importancia de la iniciativa que se presentará ante la Comisión Permanente para que inicie el proceso de análisis y discusión en las comisiones correspondientes y de esta manera se cumpla con los preceptos constitucionales vigentes.
“El Estado tiene la responsabilidad de asegurar el respeto a lo establecido en la Constitución, que en su Artículo 3° manifiesta el derecho a la educación, y en el Artículo 4° garantiza que todos los ciudadanos puedan disfrutar de la cultura en todas sus formas y expresiones. Por otra parte, en el Artículo 6º consagra el derecho a la información. En este contexto, la promoción de la lectura, en sus diversas formas, tanto física como digital, se erige como un mecanismo crucial para el ejercicio pleno de este derecho”, concluyó.