<< No basta con cobrar más aranceles, hay que convertirlos en más empleo mexicano y mejores salarios, no en más gasto del gobierno: Dip. Héctor Saúl Téllez
México está enfrentando una ola de importaciones baratas, en muchos casos subvaluadas y hay que decirlo, con prácticas desleales —sobre todo de países asiáticos— que están poniendo en riesgo empleos, empresas y cadenas de proveeduría completas en nuestro país, afirmó el vicecoordinador económico del GPPAN, Héctor Saúl Téllez Hernández.
Por ello, si bien reconició algunos puntos positivos de a reforma arancelaria qie se aprobó esta madrugada, consideró que es una medida enorme, pero focalizada y con impactos directos en industrias como acero, aluminio, químicos, textil, calzado, autopartes, plásticos y otras más.
“La Comisión de Economía, en un trabajo serio y técnico, abrió mesas de diálogo con cámaras empresariales, escuchó a todos los sectores y logró modificar más de 600 fracciones, no es cosa menor, y con esto mitigar daños mayores a la industria y al consumo”, recordó.
Sin embargo, destacó que también es verdad que no hay una definición e información completa sobre el impacto final en precios, en MIPyMEs, ni en cadenas de insumos, y no existe un plan paralelo para apoyar a las empresas y para proteger a los consumidores.
“Por eso, el PAN acompañó el trabajo técnico de la Comisión, pero votamos en abstención, enviando un mensaje claro: no nos oponemos a proteger a México, ni a su industria del dumping o comercio desleal, pero no vamos a avalar una reforma que aún tiene riesgos para las familias y MIPyMEs mexicanas’, enfatizó.
Abundó que esta reforma sí puede ayudar a defender empleos y a proteger industrias mexicanas que hoy están bajo presión por productos asiáticos vendidos de manera tramposa muy por debajo de su costo real; pero también puede provocar aumentos en precios de productos cotidianos como textiles, papel, cartón, plásticos, juguetes o electrodomésticos.
“Las MIPyMEs que usan insumos importados podrían enfrentar costos más altos, porque no en todos los casos existe proveeduría nacional y se encuentran en la necesidad de importar insumos extranjeros. Si el gobierno no acompaña esta medida con créditos, apoyos, innovación y estímulos fiscales, es la gente y no la industria y mucho menos el gobierno, la que podría pagar el costo”, aseveró.
Téllez Hernández dijo que por eso el PAN se pronuncia por sí a proteger la industria, por proteger los empleos formales y combatir el comercio desleal.
Agregó que el PAN propone que cualquier ingreso adicional por los nuevos aranceles se destine a un Fondo de Reactivación Económica y usar ingresos de aranceles para dar subsidios, créditos y capacitación a empresas y trabajadores.
Asimismo, promover nearshoring para atraer inversiones de Norteamérica y crear más JOBS seguros, toda vez que no basta con cobrar aranceles. Hay que convertirlos en más empleo mexicano y mejores salarios, no en más gasto del gobierno.
“Por eso votamos en abstención de manera responsable y congruente: que quede claro, no estamos en contra de proteger a México, pero tampoco vamos a firmar un cheque en blanco que pueda traducirse en precios más altos para las familias”, concluyó.