Estira y afloja
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) realiza análisis puntuales técnicos, económicos y legales en todo el proceso de una licitación, incluso de las empresas participantes, para lograr beneficios al país, e investiga informaciones periodísticas que alerten sobre el procedimiento. Incluso observa si los equipos contratados pudieran afectar acuerdos comerciales, en especial el T-MEC.
Esta es mi conclusión después de dialogar sobre lo escrito aquí relacionado a procesos de licitación de equipos de rayos X para aduanas y el AIFA con el general Cirilo Mondragón Rivero, Jefe S-9 (Supervisión y Seguimiento de Adquisiciones de la Sedena); el coronel Leopoldo Corona Camacho, subdirector operativo de la dirección general de Materiales de Guerra, y el coronel Sergio López Acosta, director general interino de Comunicación Social de la dependencia.
El fallo de la licitación de las 21 aduanas fronterizas se aplazó para el próximo día 17 por falta de tiempo “suficiente para analizar la información entregada por las empresas participantes”. Nada tuvo que ver lo publicado aquí sobre la detención de George Edward Walther, quien por cierto ya fue liberado. Este personaje no fue contratado por Rapiscan Systems, “lo hizo S2 Global, que junto con la anterior pertenecen al consorcio Ossi System. La licitación no se ve afectada y, de acuerdo con la Oficina del Programa de Control y Seguridad Fronteriza de la embajada de Estados Unidos, esta persona posiblemente participó en algunos eventos; antes trabajó para Leidos, que fue la que interpuso la demanda”, precisó el general Mondragón.
El 17 se dará el fallo del proceso que ronda en alrededor de 13 mil 500 millones de pesos entre seis finalistas. No todos los participantes cotizaron las seis partidas establecidas. “De ahí el por qué se necesitó un análisis profundo de las propuestas para determinar que se apeguen a la convocatoria”.
Respecto al AIFA, donde la Agencia Nacional de Aduanas de México y no la Sedena, como ya se dijo, falló a favor de la empresa LTP que comercializa equipos chinos de rayos X, en efeto incumple la normatividad aduanera con EU y Canadá, y ya está el proceso de revisión para una “probable adecuación” a fin de que México no tenga ningún problema con el T-MEC.
El coronel López Acosta explicó que en el acuerdo comercial se condiciona a las aduanas a tener interoperabilidad y compatibilidad en los equipos, y ellos no permiten la revisión de rayos X de importaciones y exportaciones que no estén bajo sus regulaciones. “Tenemos ese acuerdo que también aplica para las personas, y por eso es probable que existan adecuaciones para no afectar los compromisos en el AIFA”.
Claro, el contrato con el LTP deberá revisarse por parte de la Función Pública y en todo caso sancionar. Sedena no tiene que ver.
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