< Acusan omisión criminal del Gobierno federal frente al brote de sarampión y exige una respuesta inmediata antes de que la crisis escale a tragedia nacional.
Con más de 2 mil casos y nueve muertes, la bancada de los senadores del PRI advierte que la negligencia del Estado está costando vidas y exige vacunas, vigilancia epidemiológica y acción urgente.
El Grupo Parlamentario del PRI en el Senado de la República presentó, en el marco de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, una proposición con punto de acuerdo, publicada en la Gaceta Parlamentaria, mediante la cual exige al Gobierno federal una respuesta urgente, eficaz y coordinada frente al brote de sarampión más grave registrado en México en lo que va del siglo XXI.
La proposición detalla con precisión el colapso de la estrategia nacional de salud pública: 2,434 casos confirmados, más de 5,400 sospechosos, nueve defunciones —cinco de ellas menores de edad—, y una concentración alarmante en Chihuahua, entidad que representa el 93% del total nacional. La situación ya ha sido calificada por expertos como una emergencia sanitaria de carácter nacional.
El Grupo Parlamentario del PRI, coordinado por el guerrerense Manuel Añorve Baños, denuncia que este brote, originado en marzo de 2025, es resultado del abandono institucional, de la caída en las coberturas de vacunación y de la ausencia de vigilancia epidemiológica. Señala que el 92.3% de los contagiados no tenía ninguna dosis de la vacuna, y que las acciones del Gobierno han sido insuficientes, tardías y fragmentadas.
“El sistema inmunológico colectivo de la población se ha debilitado peligrosamente. No hay personal suficiente, no hay insumos, no hay coordinación ni visión de Estado. Se está jugando con vidas humanas”, advierte el documento.
A través de esta proposición, el Grupo Parlamentario del PRI exige que el Ejecutivo federal, por medio de la Secretaría de Salud:
- Refuerce de inmediato las campañas nacionales de vacunación contra el sarampión, incluyendo a adultos jóvenes y comunidades indígenas, rurales y de alta movilidad laboral.
- Garantice el suministro y distribución eficaz de vacunas, insumos y material diagnóstico en todas las entidades federativas.
- Implemente un sistema emergente de vigilancia epidemiológica, con personal capacitado, presupuesto suficiente y protocolos de actuación inmediata.
- Diseñe una estrategia nacional interinstitucional para contener el brote, priorizando a los estados más afectados y con mayor rezago estructural.
El PRI advierte que, de no tomarse medidas extraordinarias, el brote puede derivar en una crisis de salud pública de consecuencias devastadoras. “Las vacunas existen. Lo que no existe es la voluntad política, la capacidad operativa ni el sentido de urgencia en el Gobierno federal”, se acusa en el punto de acuerdo.
“Esto no es un tema ideológico. Es una omisión criminal que está costando vidas. La salud pública es un derecho humano. Defenderla es una obligación del Estado. El PRI no se va a quedar callado”, sentencian las y los legisladores del Revolucionario Institucional.