La tan llevada y traída frase en la política mexicana de que la forma es fondo,atribuida a Jesús Reyes Heróles, cobra vigencia una vez más al arranque de septiembre, un mes lleno de simbolismo, imágenes y mensajes encontrados.
Para argumentar, vea usted estos tres acontecimientos.
Con el inicio del periodo ordinario de sesiones del Congreso de la Unión se renovaron las mesas directivas de las cámaras de Senadores y Diputados. Dos mujeres presidirán el Poder Legislativo: Laura Itzel Castillo (Morena) en la Cámara Alta, y Kenia López Rabadán (PAN) en San Lázaro.
Pero la ausencia de la panista en la sesión solemne de instalación de la nueva Suprema Corte de Justicia de la Nación que presidió la presidenta Claudia Sheinbaum, desató versiones sobre algunos de los motivos por los que los morenistas le pusieron piedras en el camino durante un par de días.
Trascendió que se opusieron a la presencia de Kenia en los eventos donde esté la Jefa del Ejecutivo y, aunque la legisladora panista niega que exista un acuerdo, en los pasillos de San Lázaro se dice que aceptó ocupar la Mesa Directiva a cambio de no ser invitada a los actos de Presidencia de la República.
Y estará bajo la lupa de la mayoría oficialista porque dudan sobre su “imparcialidad”, pues no se les olvida que Kenia fue Jefa de Oficina de la campaña de Xóchitl Gálvez; que fue la creadora de la contramañanera para refutar al presidente Andrés Manuel López Obrador y que ha sido una de las más aguerridas voceras de la derecha en las mesas de debate.
¿Guerra total contra el narco?
Una de las banderas que se desplegó con mayor intensidad en el gobierno lopezobradorista fue la de responsabilizar al ex presidente Felipe Calderón por la violencia y crímenes en el país tras declarar una guerra contra el crimen organizado.
Pero en su edición del miércoles 3 de septiembre, el diario oficialista La Jornada cabeceó así una nota: Guerra total contra el crimen, pactan Federación y 31 de 32 gobernadores.
¿Entonces el oficialismo guinda también entró en guerra?
Ahora sí, felices con Rubio
Y cerramos con la visita a México de Marco Rubio, secretario de Estado de Trump. El político estadounidense ha sido “linchado” por propagandistas de la 4T por asegurar que López Obrador se dedicó a hacer disparates y a permitir el avance del crimen organizado.
Incluso horas antes de su encuentro en Palacio Nacional con la Jefa del Ejecutivo mexicano, una de las más activas voceras del oficialismo, Sabina Berman, difundió una foto del hijo de inmigrantes cubanos para burlarse de él y sugerir que era gay.
Pero después de la reunión con Sheinbaum, los mismos que lo lapidaron lo convirtieron en un “ángel” porque –dicen y caricaturizan- le dio un “calladón de hocicos” a los opositores de la 4T al afirmar que “no hay otro gobierno en el mundo que esté cooperando más en contra de la criminalidad que el gobierno de México”.