ESTIRA Y AFLOJA
Ya está en Washington el subsecretario Jesús Seade, como cabeza en las negociaciones del T-MEC, después de que el fin de semana se reunió con Justin Trudeau, el primer ministro de Canadá. Está muy confiado en que sí podrá evitar el descarrilamiento del tratado comercial al que apuesta la AFL-CIO de Richard Trumka, y sus 50 congresistas.
Esta organización laboral de EU es la que apoya también al senador Napoleón Gómez Urrutia, quien junto con los steelwokers de Canadá, convirtieron en caballo de troya al morenista Gómez Urrutia para impulsar la ley laboral que criminaliza la subcontratación en México. Y por poco lo logra, porque sí se aprobó ayer en la Comisión de Trabajo y Previsión Social del Senado, pero no llegó al pleno para su votación por una petición del senador Ricardo Monreal.
Como se puede apreciar, es un engrudo político que busca entorpecer la negociación comercial y la política laboral en México. El pretexto de la AFL-CIO es que en una empresa mexicana, exportadora de cemento a EU se eligió a un líder laboral sin que los sindicalizados supieran; esta es la razón por la que quieren sancionar a empresas exportadoras mexicanas, sin importar su origen, si consideran que se viola el proceso de elección libre y secreta de dirigentes sindicales.
Y quieren prohibir la exportación a cualquier empresa establecida en México por faltas recurrentes en materia laboral o ambiental contra los principios de la OMC y el TLCAN. Muchas de las posturas de grupos opositores al libre comercio de EU son defendidas por el secretario de Comercio, Robert Lighthizer, y el USTR, y de ahí la nueva propuesta de negociación laboral y el rechazo de México. Es también una venganza porque México logró avanzar en el capítulo energético y establecer como obligación trilateral la conformación de paneles para la solución de controversias.
No será fácil sacar el asunto para el equipo mexicano, encabezado por Seade y con apoyo total del sector empresarial, pero hay mucha confianza. No se permitirán absurdos en la negociación ni que se afecte la cadena productiva de bienes exportables con una fiscalización externa.
Cuarto de junto
Minera Frisco, de Carlos Slim Helú, contratará a BOFA Securities Inc. y HSBC Securities (USA) Inc. como acreedores en un financiamiento hasta por 875 millones de dólares para impulsar proyectos de varias subsidiarias.
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