La administración Biden confirmó ante un tribunal de Texas que aceptará la orden judicial que impide al gobierno deshacerse de los materiales para la construcción del muro fronterizo, acción legal que permitirá al presidente electo, Donald Trump, continuar utilizándolos, anunció el fiscal general de Texas, Ken Paxton. El magnate calificó la decisión de victoria importante y crucial para Estados Unidos y la seguridad nacional.
La oficina de Paxton aseguró que si la administración saliente se deshace de los materiales comprados con fondos sujetos a una orden judicial constituiría una conducta poco ética y sancionable, además de que los funcionarios involucrados serían culpables de desacato judicial.
Biden puso fin abruptamente a la construcción de la pared monumental en la frontera con México en enero de 2021, después de que, durante la primera administración de Trump, fueron instalados 725 kilómetros de dicha obra.
Si bien los halcones fronterizos dicen que un muro es una herramienta fundamental para detener la migración ilegal, algunos demócratas han dicho que se trata de una acción xenófoba e ineficaz, informó Fox News.
Trump aseveró que dará continuidad a la edificación de la valla limítrofe a fin de “proteger a nuestro país de los delitos violentos contra los migrantes, el contrabando de fentanilo, el tráfico sexual, los ataques ‘terroristas’ y otros desastres atroces que pueden acabar con la nación.”
El muro estadunidense de El Paso, Texas, frente a la chihuahuense Ciudad Juárez, de México. Foto Cuartoscuro
El republicano ha calificado de casi un acto criminal los esfuerzos de Biden para vender a un precio reducido los materiales referidos.
Texas ha reiterado que hará todo lo posible para ayudar a la administración entrante a levantar la muralla en el extremo sur estadunidense.
El magnate ha asegurado que regresará al poder con una serie de herramientas tecnológicas perfiladas a cumplir su promesa de campaña de tomar medidas enérgicas contra la migración, entre ellas, sistemas de vigilancia, incluso con inteligencia artificial que la administración Biden ya emplea en tareas cruciales de seguimiento y detención y, en última instancia, la deportación de migrantes que carecen de un estatus legal de residencia permanente.
Si bien los funcionarios de migración han utilizado la tecnología durante años, una carta del Departamento de Seguridad Nacional, la cual tuvo a la vista la agencia de noticias estadunidense Ap, detalló entre estas herramientas algunas impulsadas por inteligencia artificial que ayudan a tomar decisiones sobre si un indocumentado debe ser detenido o vigilado.
Un algoritmo, por ejemplo, clasifica a los migrantes con un puntaje de huracán que va de 1 a 5, para evaluar si alguien escapará de la supervisión de la agencia. También se incluye en las herramientas logísticas del gobierno una aplicación móvil llamada SmartLINK, que utiliza reconocimiento facial y puede rastrear la ubicación específica de un extranjero sin documentos.
En tanto, un funcionario del equipo de transición de Trump afirmó que los recientes comentarios del presidente electo sobre anexionar, comprar o controlar Canadá, Groenlandia y el Canal de Panamá, respectivamente, son parte de un plan más amplio que tiene como objetivo contrarrestar a Rusia y China, informó The Washington Post.
Con información del periódico La Jornada