O lo que es lo mismo: para qué te juntas con ellos, si ya sabes que son bien chuecos.
¡Caray! ¿Usted qué opina? Se arma el gabinetazo y la doctora que lo quiere con un cariño personal, lo deja fuera, pese a que se la ha rifado hasta el ridículo y de pena ajena.
¡Chin!
Hubo acomodo para quienes soñaron con ser el favorito de Su Alteza Serenísima y participaron, como la doctora, en ese remedo de contienda interna. Y vino el pago.
Todos en línea. Ricardo Monreal, coordinará a los diputados federales de Morena; Adán Augusto López Hernández, será el pastor de los senadores morenistas y Marcelo Ebrard secretario de Economía.
Bueeeno, hasta el simpático güerito chiapaneco Manolito Velasco Coello cobrará quincena como coordinador de la bancada del Verde en el Senado de la República.
Velasco Coello fue coordinador de alianzas en la campaña de doña Claudia Sheinbaum Pardo y no hizo berrinche cuando quedó fuera de los perfiles considerados para integrar el gabinetazo que se batirá durante seis años por amor a la patria y en la construcción de eso que llaman el segundo piso de la 4T.
Sólo José Gerardo Rodolfo Fernández Noroña, cuyo sueño guajiro fue que el licenciado presidente lo eligiera candidato del Consorcio Morena y Asociados a la Presidencia de la República, se debe conformar con un escaño en el Senado, cargo al que está dispuesto a renunciar porque no quiere migajas.
El cargo es irrenunciable, pero se puede ir de licencia por seis años sabáticos digamos a la academia o, tal vez no todo esté perdido. Porque…
Mire usted, públicamente la Princesa Caramelo dijo ayer lunes que va a platicar con él. Pero, golpe dado ni Dios lo quita. Y conste que el licenciado José Gerardo Rodolfo Fernández Noroña lo mismo ha sido bufón en el Consejo General del INE donde lo exhibe Guadalupe Acosta Naranjo, que golpeador desde la tribuna legislativa contra la oposición y, en especial, de las senadoras del PAN, Kenia López Rabadán y Lilly Téllez.
Aunque debe citarse que las aguerridas legisladoras le han puesto fenomenales madrizas e incluso la sonorense le aplicó el mote de Changoleón, apenas en el nivel de praxis con el proceder de José Gerardo Rodolfo, diputado federal por el Partido del Trabajo, integrante de la Comisión Permanente, de poner apodos a medio mundo.
El caso es que el diputado Changoleón –Lilly Téllez dixit–, se quedó fuera del gabinete. Y conste que ha hecho méritos desde aquellos días en los que, como fundador de la Asamblea Ciudadana en Defensa de los Deudores de la Banca, nos pedía el favor a reporteros de la fuente presidencial para ayudarlo a ingresar a los actos del entonces presidente Ernesto Zedillo para protestar.
Quizá usted recordará cuando se tiró al piso frente a Zedillo para llamar la atención. Luego se dejó el pelo largo y andaba con cola de cuaco, imagen que le quedaría ad-hoc en estos días en que el peinado se ha puesto de moda.
Dice que merece un cargo en el primer equipo porque quedó en tercer lugar en esa carrera celebrada con el arbitraje de Su Alteza Serenísima rumbo a una elección tramposa y maiceada con miles de millones de pesos que alcanzaron a “convencer” a quienes antes de lo que se imaginan comenzarán a renegar haber votado por la alianza “Sigamos haciendo historia”.
Por de pronto, el licenciado José Gerardo Rodolfo Fernández Noroña se llama burlado por no estar en el gabinetazo y ni siquiera ser llamado a coordinar la bancada de Morena en el Senado o el Palacio Legislativo de San Lázaro.
¡Recáspita, doctora Sheinbaum!
Así, el ínclito y siempre civilizado observador del Manual de Carreño, Fernández Noroña armó tremendo berrinche y se reclamó: porqué a Monreal y Adán Augusto y Marcelo si les dieron espacio él quedó en tercer lugar en esa mascarada de contienda interna entre las corcholatas dizque presidenciables.
Y, al punto de la lágrima y la mentada de madre reclamó:
“Públicamente Mario Delgado me decía: ‘medalla de bronce por el tercer lugar’. Yo había dejado pasar, pues dije: ‘¡ya hombre!, está claro el mensaje de que Adán Augusto va a encabezar el Senado, por ahí va el acuerdo’, pero luego dije: ‘es injusto, es incorrecto, están pasando por encima de uno, eso no va a hacer que yo divida, que rompa, simplemente no se cumple el acuerdo, ta´ bien tomo nota’. Pero es incorrecto que al último lugar le den la coordinación de la Cámara de Diputados (en alusión a Ricardo Monreal”.
Sí, sí, ¡qué poca! ¿Por qué dejan fuera al ejemplo de político honesto, defensor de las mujeres, prístino? ¿Por qué, por qué? Merece estar en el gabinete, se la rifó bien y bonito en la campaña de la Princesa Caramelo como vocero de campaña presidencial. ¡¿Por qué, Andrés Manuel lo has abandonado?!
“Dicen –insiste el demócrata Fernández Noroña–que yo no soy tercer lugar, que es Adán Augusto López Hernández. ¡Ah, bueno!, entonces a Adán Augusto López Hernández le correspondería la coordinación de la Cámara de Diputados.
“No es cierto. Yo quedé en tercer lugar, pero si lo que dice Ángel Balderas fuera cierto, entonces a mí me correspondería ir al gabinete, en cuarto lugar. ‘¡Ah, pero te dieron una senaduría pluri!’. Se las regreso, se las regreso. No se vale hacer trampa en la discusión, ahora resulta que quien quedó en último lugar le dan el tercer lugar y justifican eso”.
Bueno, bueno. La Princesa Caramelo, atendió el caso de su cuaderno en la conferencia ofrecida ayer, espacio en el que por cierto aparecieron integrantes de la barra aplaudidora y mercenaria de la mañanera en vías de extinción, como la güerita keniana que no atina a hacer una pregunta periodística.
“A ver –atajó la Princesa Caramelo–. Gerardo Fernández Noroña es un compañero de primerisisisima, eeh, aparte del cariño como compañero de lucha, tenemos un cariño personal porque él fue muy cercano a, le decíamos “La Chata”, María Fernanda Campa, hija de Valentín Campa que yo conocí desde muy pequeña porque ella era esposa de Raúl Álvarez Garín, muy amigos de mi madre, entonces, hasta tenemos personas en común que nos formaron en algún momento de nuestra vida, que había cercanía”.
¡Échese ese trompo a la uña!
“Entonces –continuó–, Gerardo va a seguir jugando un papel muy importante en el movimiento, de concientización, de formación”.
¿Cómo para cuándo, porque el licenciado Fernández Noroña anda bien encabronado?
“La gente quiere muchísimo a Gerardo –explica la Princesa Caramelo—“.
Y para amainar la tormenta ofrece: “y ya voy a platicar con él, en su momento; recuerden que él entró también a la encuesta, por el PT, o sea, entraron, eh, entramos, eh, Marcelo, todos somos parte del mismo movimiento, ¿no?, pero digamos, formalmente entraron Marcelo, Adán Augusto, Monreal y su servidora como parte de Morena.
“Entró Manuel Velasco por el Verde y Gerardo, que no es militante del PT, hay que decirlo, pero que ha sido diputado del PT entró formalmente como, digamos, la propuesta del PT. Pero es un compañero del Movimiento de primera y no tiene porqué haber ni de nuestra militancia ni del propio Gerardo ni nada, él es parte del movimiento y de manera muy importante y siempre nuestro respeto y reconocimiento”, explicó la Princesa Caramelo.
¿Y?
Será el Sereno, pero el berrinche del licenciado José Gerardo Rodolfo (¿del Sagrado Corazón de Jesús?) Fernández Noroña evidenció ausencia de unidad y cumplimiento de compromisos en el interior del equipazo, cuyos primeros nombramientos ofrecieron otra película. ¿A poco no, Drakko? Digo.