No, no son iguales, son peores. A la desgracia le dan el trato que demandan evitar; politizan cualquier acto que contraríe al proyecto transexenal. Y el discurso oficial es un insulto al sentido común que borda entre el gatopardismo y la cínica mentira.
¿Recuerda usted cuando Enrique Peña Nieto –entonces poderoso y vilipendiado presidente al que la oposición lópezobradorista zarandeó por inculto– recomendó a Rosario Robles Berlanga no preocuparse ante la embestida que se había desatado en su contra por su presunta responsabilidad en actos de corrupción?
Bueno, Rosario es huésped sexenal de la penitenciaría de Santa Martha Acatitla, donde la veleidosa justicia mexicana en manos del poder en turno la exhibió delincuente y condenó de por vida a cargar esa condición, como ocurrió en su momento con destacados personajes políticos que pagaron la factura que su jefe generó en la lucha por el poder público.
Bien. Sin duda ya se enteró que Su Alteza Serenísima pronunció la frase mágica, manto de la impunidad con el que cubrió a la doctora Claudia Sheinbaum Pardo y le declaró no sólo su apoyo frente a esta disputa por la nominación a la Presidencia de la República, también aseguró que ayudará a la reparación de la Línea 12.
¿Recuerda usted que el maestro Mario Delgado Carrillo aseguró que en la construcción de aquella tristemente célebre –como citan los clásicos de la nota policiaca—línea del Metro no hubo participación de dineros federales.
¡Caray! El itamita y gerente del Corporativo Morena, amén de que no ha aparecido en días recientes para asumir la responsabilidad que le toca como jefe de las finanzas de la administración de Marcelo Ebrard, mintió porque justamente en aquellos días cuando se aproximaba el fin del sexenio, Marcelo pidió apoyo al entonces presidente Felipe Calderón porque el presupuesto para la L12 se había agotado.
Se requería de tres mil millones de pesos y Marcelo pidió esa cantidad a Calderón Hinojosa, a quien el hoy clasemediero licenciado presidente Andrés Manuel odia con odio macuspano, y fíjese usted que Felipe no solo no se negó a prestarle esa bicoca que seguramente era para comprar focos y cemento, ¡no!, le facilitó y entregó cuatro mil millones de pesos. Y ese recurso, hasta donde se sabe formalmente, lo recibió el administrativo que firmaba como licenciado Mario Delgado Carrillo.
Hoy, la doctora Claudia –¿por qué no la escurridiza y fantasmal Florencia Serranía Soto, que cobra y cobra bien como directora del Sistema de Transporte Colectivo Metro?—se apresta a recibir el apoyo económico, moral y espiritual del licenciado López Obrador. ¡Más mezcla, maistro!, hay que decirle a Delgado Carrillo.
Y sí, en efecto, la historia se repite y, finalmente mimetizado por haber abrevado en los veneros del priismo, el licenciado presidente extiende su manto virginal –porque nunca, nunca ha pecado ni de palabra y obra en materia de corrupción—y hoy cubre a la doctora Sheinbaum en el entendido de que, pasare lo que pasare, dictaminase lo que se dictaminase en este peritaje al accidente que no incidente en la L12 del Metro, ella está a salvo.
Así de burdo el encubrimiento, porque, sólo cheque usted lo que dijo Su Alteza Serenísima en la mañanera: “(…) Entonces, regresando al tema, vamos a esperar a que la jefa de Gobierno informe y buscar la solución. Nadie quiere que sucedan estas desgracias, sólo los viles, los canallas, trafican con el dolor ajeno”.
¿Quiénes son los viles y canallas que trafican con el dolor ajeno? ¿Quiénes perdieron al hermano, la esposa, el marido, el abuelo, el nieto… en esa desgracia consecuencia de arrebatos y prisas políticas?
No, no es una referencia simplista ni abono a favor de una u otra bandería que midió fuerzas en la elección del pasado domingo 6 de junio.
Es postura política canalla esa que soslaya la desgracia del pueblo bueno; ésa que manda al carajo la obligada atención humanitaria, porque considera que esa práctica era ejercicio de los de antes, los neoliberales.
Lea usted:
–Presidente, preguntarle: hace unos días reportaron lo de la compra de las medicinas. Ayer (martes) hubo un bloqueo por parte de padres de niños con cáncer, hoy los van a recibir en la Secretaría de Salud, pero ¿qué le han a usted informado?, si sigue el desabasto, si ya está en vías de solucionarse, ¿qué es lo que se sabe al respecto?—preguntó una colega.
–Se está avanzando mucho –respondió el licenciado López Obrador–. Creo yo que para la semana próxima ya tenemos compradas todas las medicinas y también equipos médicos, la semana próxima. Se está haciendo una revisión de todo lo que se ha adquirido, qué nos falta, con la ONU, con la Unops y todo el sector salud está trabajando en esto. Vamos a informar creo que la semana próxima ya. Y bien, se va avanzando.
–¿Les diría a los papás que ya están…?—insistió la reportera.
–Sí, sí, que estamos dedicados de tiempo completo a eso, que lo estamos viendo como algo prioritario, urgente, están trabajando literalmente día y noche, y consiguiendo todos los medicamentos en el mundo, no hay ninguna limitación de dinero. Es un asunto de abasto también mundial en algunos medicamentos, en algunas claves, pero lo estamos resolviendo—atendió el licenciado Andrés Manuel.
Los padres de niños con cáncer debieron bloquear el acceso a la Terminal 1 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, en demanda de que les atiendan, que se surta de medicamentos a sus pequeños. ¿La demanda es nueva? ¡No!, data desde el inicio de la administración del Andrés Manuel López Obrador, quien se atreve a mentir y asegura, sí, asegura que “lo estamos viendo como algo prioritario, urgente, están trabajando literalmente día y noche, y consiguiendo todos los medicamentos en el mundo, no hay ninguna limitación de dinero”.
¿Viles y canallas los que trafican con el dolor ajeno? ¿Cómo se llama a quienes desprecian al dolor ajeno y pregonan que les duele todos los días la desgracia de la L12?
Lea usted otra perla.
–Además del apoyo económico, que seguramente será importante para poder rehabilitar lo antes posible y que se vuelva a dar servicio en esta Línea 12 del Metro, ¿qué otros apoyos estará usted ofreciendo a la jefa de Gobierno para salir de esta circunstancia en lo político?—preguntaron a Su Alteza Serenísima.
–Todo, todo, todo mi apoyo y mi respaldo también, porque los adversarios nuestros se han lanzado con todo en este caso, bueno, hasta el New York Times, ya no sólo es el Reforma, ya subió de nivel. Entonces, hay desde luego una estrategia politiquera, se usó en vísperas de la campaña para afectar al movimiento al que pertenecemos en las elecciones, hubo guerra sucia, llamadas telefónicas y todos los medios—respondió el clasemediero licenciado presidente.
¿Quién politizó el caso de la L12? ¿Los viles y canallas?
Bueno, una más del clasemediero Andrés Manuel cuando desvía el asunto y responsabiliza a la prensa de todos los males y, de pasada descalifica a quienes le ganaron a Morena en la Ciudad de México.
–¿Cree usted que esta situación repercutirá en las eventuales aspiraciones de Marcelo Ebrard y de Claudia Sheinbaum?—le preguntaron en la mañanera de miércoles.
–Es que –respondió Andrés Manuel–, con todo respeto, nuestros adversarios están muy menguados, no tienen personas con prestigio, no tienen gente honesta, no tienen gente íntegra, no tienen gente que le tenga a amor al pueblo. Vean quiénes ganaron aquí con la alianza conservadora. La gente ni siquiera supo por quién votó. Son impresentables. Fue el coraje, porque los envenenaron con la guerra sucia.
¡Ajá! ¿Y los damnificados de la desgracia de la L12? ¡Bah! En la paráfrasis de Peña Nieto: No te preocupes, Claudia, es asunto de viles y canallas que demandan justicia. Digo.
COMO ME LO PLATICARON. En el estudio llamado “Crece deuda estatal por pandemia”, elaborado por la consultora “Aregional“, ésta reconoce al gobierno de Quintana Roo, encabezado por Carlos Joaquín González, por haber logrado la reducción en 2.2% la deuda estatal en 2020, que equivale a 773.2 millones de pesos.
Dicha reducción se logró merced a los ajustes racionales del gasto que permitieron canalizar más recursos para enfrentar la emergencia provocada por el Covid-19.
sanchezlimon@gmail.com www.@msanchezlimon @msanchezlimon1