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Por no alcanzar mayoría calificada, se desechó el dictamen que pretendía reformar el artículo 41 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en materia de reducción de financiamiento público otorgado a los partidos políticos.

Con 207 votos en contra se da por desechado el dictamen, lo que representa un duro revés a la bancada de morena, quienes proponían reducir el 50 por ciento el presupuesto a los institutos.

Previo a la votación Mario Delgado Carrillo, líder parlamentario de Morena, dijo que la clase política ganaría “mucha autoridad moral”, si se diera la reducción al presupuesto de los partidos.

“Hoy llegó el día donde los partidos le van a tener que rendir cuentas a sus electores en materia de financiamiento, si están de acuerdo o no con el recorte”.

Afirmó que dicha modificación representaría un ahorro aproximado de 2 mil 500 millones de pesos para el 2020, detalló.

El también presidente de la JUCOPO, recordó que Morena no fue el partido que tuvo más recursos en el 2018; no obstante, ganó la presidencia, la mayoría en el Congreso y muchas legislaturas locales.

A su vez, la coordinadora de los diputados del PRD, Verónica Juárez Piña, se pronunció por hacer una reforma integral en la materia, para que las reducciones no debiliten a los partidos, pero sí se contribuya a la austeridad.

“Estamos en favor de poder reducir lo que hasta ahora se está recibiendo, pero me parece que debe existir una fórmula que nos permita ir a la contienda de manera equitativa”, apuntó.

Sobre este tema, la diputada federal priistas, Dulce María Sauri Riancho, declaraba que el financiamiento a los partidos es un componente fundamental de la estructura y funcionamiento del sistema electoral mexicano en su conformación moderna.

“Por tanto, es ingenuo o tal vez perverso, suponer que su modificación no trastocará radicalmente la forma de ver y entender la democracia y los procesos electorales en el futuro inmediato”.

Por lo que advertía “este dictamen representaría, de ser aprobado, el primer paso hacia morenizar el sistema de partidos en el país. El riesgo más grande que se enfrenta con esta reforma es que se conduzca al país al desastroso escenario de tener una tiranía de la mayoría”.

Mientras que Acción Nacional, a través del legislador Marcos Aguilar Vega señalaba que la propuesta de Morena no significa un avance, sino una ocurrencia disfrazada de buenas intenciones.

“La pretensión es aniquilar a los partidos políticos de oposición, pues de concretarse debilita su esencia como entidades de interés público, y sus fines se verían vulnerados”.

En tribuna el panista, retó “si realmente quieren una reforma en materia de reducción de financiamiento, convoquemos a un parlamento abierto, para conocer los pros y contras de la misma, estoy seguro que además resultaría necesario e indispensable para entrar a reformar de fondo el sistema de fiscalización, de transparencia y rendición de cuentas, pues estudios diversos han demostrado que entre las instituciones menos transparentes se encuentran precisamente los partidos políticos…

“Si realmente queremos transformar y avanzar en este tema, empecemos por fortalecer los mecanismos de financiamiento privado y autofinanciamiento, quitemos los candados existentes a este esquema y avancemos en serio hacia un nuevo modelo que permita a los ciudadanos aportar a los partidos políticos recursos…

“Si realmente queremos transformar y avanzar este tema, empecemos por fortalecer los mecanismos de financiamiento privado y autofinanciamiento, quitemos los candados existentes a este esquema y avancemos en serio hacia un nuevo modelo que permita a los ciudadanos aportar a los partidos políticos recursos…

“La equidad en la contienda electoral debe prevalecer. Si la intención es reducir el financiamiento público, se debe analizar la forma de calcular y asignar dichos recursos, pues hoy se calcula en base al número de ciudadanos inscritos en el padrón electoral por el 65 por ciento de la Unidad de Medida y Actualización. El resultante de esta operación se distribuye en un 30 por ciento de manera igualitaria, y el restante 70 por ciento con base en la votación obtenida”, apuntó.