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El próximo miércoles 1 de diciembre, Andrés Manuel López Obrador dará otro de los innumerables informes de actividades, pero ahora lo quiere realizar como en los viejos tiempos, en un zócalo lleno, donde la sana distancia importará un bledo y la posibilidad de que una cuarta ola de Covid-19, aderezada con el virus ómicron, sea la siguiente fase a vivir en México.

Si lo vemos desde el punto de vista político, el informe posiblemente mostrará un país diferente al que vivimos, señalara que la consolidación de su proyecto 4T se dará en el 2022, para que a partir de ese año podamos observar los beneficios del mismo.

Pero existirá un motivo más para anticipar su derrota y manifestará que esta consolidación solo será posible si se aprueba la reforma eléctrica, la cual nos dará una autosuficiencia energética y que el gobierno evitará con ella que los neoliberales sigan enriqueciéndose a costas de millones de mexicanos.

López Obrador, o al menos su equipo entiende que para que esta reforma pueda dar estos beneficios deberán pasar por lo menos 4 o 5 años, aplicando grandes cantidades de recursos que posiblemente implique recortes mayores a los presupuestos que se otorga al campo, a la industria, educación y posiblemente ciencia y tecnología.

López Obrador nos pintara un país con crecimiento económico, el cual no se ha presentado y este año no lograremos siquiera alcanzar un 5.5 por ciento, sin embargo, este crecimiento, que subrayará como un triunfo, aun cuando solo sea el rebote natural de una economía que cayó en el 2020 en términos porcentuales de 8.5.

Es decir, no creceremos lo necesario para colocar a la economía en cifras anteriores a la pandemia del Covid-19, seguirá el desempleo, el subempleo la falta de creación de más fuente de empleo y la informalidad.

Mencionara un país con mayor seguridad pública, olvidando que cada año la cifra de homicidios es elevada, donde los feminicidios no cesan y donde los grupos criminales hacen rehenes a los usuarios del trasporte público, a quienes viajan por las carreteras del país, que son cada vez más inseguras y olvidando que los poblados y municipios del país son disputados por los cárteles del narcotráfico.

Manifestará que se cumplió con la meta de tener una gran parte de los mexicanos vacunados contra el Covid-19, pero no señalara que algunos de estos grupos, les hace falta recibir una segunda o tercera dosis de la vacuna, donde los niños no serán vacunados en su mayoría, porque así lo deciden las autoridades sanitarias del país.

Evitará señalar que el sistema de salud prometido, similar a los de Europa, no se logrará en este sexenio y posiblemente tarde un poco más porque destruyo un sistema que empezaba a dar resultados por otro que no ha logrado siquiera empezar a establecerse adecuadamente.

López Obrador evitará tocar el tema del incremento de los precios en productos agropecuarios y que la importación de estos seguirá incrementándose a falta de producción nacional, porque el campo en México no tiene los presupuestos suficientes para producirlos, fertilizarlos, regarlos y lo peor tierra para sembrarlos, porque ahora se siembra “otro producto”.

López Obrador pintará un país distinto al que vivimos y para evitar ser cuestionado por los fifis, la clase media o los opinadores, ha manifestado que su informe será con la presencia del “pueblo sabio”, que no serán más que los mismos trabajadores del gobierno federal, algunos que vendrán de los estados “patrocinados” por los gobiernos estatales, al igual que los municipales.

Pero en su mayoría estará conformado por aquellos grupos “beneficiados” por los programas sociales, ante la amenaza de perder estos programas si no se asiste al informe.

López Obrador hablara de su México, de su país, pero tampoco tomará en cuenta que ante una concentración de gente tan grande se corre el riego de desatar, nuevamente, la pandemia que en algunos meses más nos obligara al confinamiento, al cierre de empresas, a la pérdida de empleos, a que las familias pierdan sus ingresos y a sumar el número de pobres en el país.

Sin duda el alter ego de una persona es peligroso para millones, pero eso no importa, porque lo importante es llenar el zócalo.