El patrón debe estar muy contento.
Y cómo no, si está documentada la dócil obediencia de quienes, proyectados desde Palacio Nacional, aspiran al dedo presidencial para 2024.
El script es el mismo, como advertimos aquí el 19 de mayo en la columna titulada El oportunismo se alinea con las corcholatas presidenciales:
Previamente, en la víspera, anuncian su visita a cualquiera de los seis estados donde habrá elecciones el primer domingo de junio: Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas.
También anuncian su solicitud de descuento por andar en labores ajenas a sus funciones públicas y, descaradamente, en promoción de candidatos de Morena y autopromoción.
A su arribo se les organiza un mitin donde el grito es el mismo: ¡Pre-si-den-te, pre-si-den-te!… O ¡Pre-si-den-ta, pre-si-den-ta! si es el caso.
Y sí, luego se plantan ante la prensa para declarar las ambiciones previamente instruidas desde Palacio Nacional a voz en cuello para toda la República.
Ni modo de contradecir al jefe.
LOS PRURITOS DE ADÁN
Aquí hay un matiz:
En un principio Adán Augusto López tuvo cierto recelo de abrir sus sueños para no afectar la gobernabilidad a la cual fue llamado por su amigo y paisano.
Pero el prurito se rompió cuando no prendía la consulta del 10 de abril y fue necesario dirigirlo a lanzarse contra el Instituto Nacional Electoral (INE) y los consejeros presididos por Lorenzo Córdova.
Primero fue a escondidas a Jalisco, donde escudó su viaje a paladear birria tatemada.
Pero sus visitas a Coahuila y Sonora se hicieron en avión oficial (Guardia Nacional, GN) y acompañado del gerente morenista Mario Delgado, el subsecretario Ricardo Mejía y los gobernadores Carlos Manuel Merino (Tabasco) y Alfonso Durazo (Sonora).
En Palacio Nacional se defendió el uso de recursos públicos y luego siguió la instrucción a todos de respaldar a los abanderados de Morena en los seis estados.
En especial a los preferidos de Palacio -Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López-, en cuyo listado no cabe el líder senatorial Ricardo Monreal.
Y ahí van las corcholatas, ruede y ruede de mitin en mitin.
FIRMEZA DE MONREAL
1.- Jamás será el preferido, pero Ricardo Monreal ya pasó a las propuestas.
Tiene un plan de gobierno para atacar los problemas más sensibles a la población: seguridad pública, desempleo, estancamiento económico, educación…
Ya está en 2024 y se mantiene firme.
Contra los dictados palaciegos, usados para disfrazar el dedazo entronizado por el priismo más rancio y dictatorial, insiste en exigir consulta pública.
¿Cómo?
¡Que se abran los cielos!: vigilada por el INE de Lorenzo Córdova para darle valor porque él no cree en las encuestas estilo 2011 y 2017, de las cuales fueron víctimas Marcelo Ebrard y él, respectivamente.