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Puede verse como tolerancia.

O bien como un esfuerzo ideado con el fin de evitar divisiones irreconciliables en la estructura de Gobierno y en su partido.

Pero dos aspirantes presidenciales sin quienes no repetiría Morena, Ricardo Monreal y Marcelo Ebrard, tienen mayor libertad para moverse en su lucha por ganar simpatías

El primero ha revaluado su papel como jefe del control político del Senado de la República y ha podido operar nombramientos con autonomía.

Así debe verse la designación de Rafael Luna Alviso, tan cercano al zacatecano, como consejero del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai).

Monreal ya no tuvo la rigidez del Ejecutivo federal usada para imponer a Rosario Piedra Ibarra a fin de convertir en operadora del régimen a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).

Y el canciller estuvo en posibilidad de negociar con el magnate Elon Musk el traslado de Tesla a Santa Catarina a pesar de la oposición presidencial, so pretexto de carecer de agua.

Ese no era el problema, según se demostró con la decisión final, sino un capricho personal no entendido ni atendido por el fabricante líder mundial de automóviles eléctricos.

EN TERRENOS MINADOS

Pero hay más señales de estos cambios.

Además de lo narrado, en esa reconformación cabe la denuncia presentada el miércoles por el equipo de Marcelo Ebrard ante la Comisión Nacional de Honor y Justicia de Morena.

Malú Micher, Carlos Palacios y Emmanuel Reyes en su queja subrayan hechos u omisiones del dirigente Mario Delgado y los editores del periódico Regeneración, en abierta promoción por Claudia Sheinbaum.

¿Con recursos públicos?

Pero viene más.

Ahora el empeño de Ricardo Monreal y Marcelo Ebrard es demostrar su fuerza mediante la destrucción de estructuras oficialistas a favor de presuntos favoritos de Palacio Nacional.

Adelantemos una de las muchas escenas en puerta:

Ebrard organiza un gran acto masivo en Acapulco para exhibir su estructura en un estado, Guerrero, supuestamente ya entregado por el clan de Félix Salgado Macedonio y su hija Evelyn Salgado.

Con ese acto se comenzará a desmontar un aparato en el cual participan también otros morenistas: la alcaldesa del puerto, Abelina López, y sus antecesores Luis Walton y Alberto López Rosas.

Tal estrategia se replicará en otras entidades donde los gobernadores usan recursos públicos a favor de alguna de las corcholatas favoritas o supuestamente punteras.

JARDINES DEL PEDREGAL

Lía Limón es una alcaldesa de personalidad.

En los gobiernos capitalino y de la república la ven como posible candidata para jefa de Gobierno de la Ciudad de México en 2024 por la alianza opositora.

Pero también le dan seguimiento vía denuncias.

Hay varias en la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) y en el Invea por presuntas anomalías en la alcaldía Álvaro Obregón.

Una de ellas llama la atención: vecinos de Jardines del Pedregal acusan el derribo de 600 árboles en Avenida de las Fuentes 245, donde ahora se levanta una gran obra.

¿Qué harán la Procuraduría de Mariana Boy y el Invea de Teresa Monroy?