· A partir de 2019 -por instrucciones del presidente López Obrador- los refugios para mujeres que viven violencia extrema, dejaron de recibir subsidios gubernamentales
· El Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva, canceló la convocatoria 2019 para concursar más de 346 mdp aprobados en el PEF de ese ejercicio fiscal
· El objetivo de los refugios es tener un espacio temporal que ofrece servicios de protección, alojamiento y atención con perspectiva de género a mujeres y sus hijos que viven en situación de violencia familiar o de género, extrema
Tras enfatizar que, tan solo en lo que va del año, más de 500 mujeres han sido víctimas de feminicidio en México y que oficialmente se reporta un ascenso en los casos de trata de personas y violaciones; el Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en la Cámara de Diputados, a través de la Diputada Laura Lynn Fernández Piña, presentó una Proposición con Punto de Acuerdo por el que se exhorta a los titulares de las secretarías de Hacienda y Crédito Público, y de Salud para que se reactive y asignen recursos al programa “Refugio para Mujeres Víctimas de Violencia Extrema”, en el marco de la elaboración del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2023.
Fernández Piña destacó que la medida es urgente y por ello se ha presentado en el marco de las sesiones de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, debido a que la mayor cantidad de agresiones y ataques contra mujeres ocurre en sus propias viviendas mientras realizan actividades de crianza y cuidado de sus hijos; y si bien los principales artefactos para asesinarlas o agredirlas son armas de fuego; también destaca el uso de la fuerza a través del ahorcamiento, estrangulamiento y sofocación de parte de sus parejas, especialmente.
La legisladora federal subrayó que, pesar de que México cuenta con ordenamientos como: La Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia; sanciones según el tipo penal contenidas en el Código Penal Federal, y la llamada “Ley Olimpia”, por mencionar algunas; son insuficientes ante el incremento de crímenes, agresiones; pero, sobre todo, por los niveles de impunidad vigentes.
“Lamentablemente –destacó- el presidente Andrés Manuel López Obrador instruyó a que los refugios para mujeres que viven violencia extrema, dejaran de recibir subsidios del gobierno federal a partir de 2019, una vez que el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva cancelara la convocatoria para concursar más de 346 millones de pesos aprobados en el Presupuesto de Egresos de la Federación correspondiente a ese ejercicio fiscal”.
“El objetivo de los refugios –aclaró la legisladora- es tener un espacio temporal que ofrece servicios de protección, alojamiento y atención con perspectiva de género a mujeres y sus hijos que viven en situación de violencia familiar o de género extrema, entendida ésta como lesiones que pongan en peligro la vida de ella y sus hijos, aislamiento extremo, inadaptación a las actividades de la vida diaria, depresión y redes de apoyo social inexistentes o inseguras”.
Laura Fernández enfatizó que estos albergues permiten a las mujeres y sus hijos permanecer hasta por un período de tres meses (pueden egresar antes o reingresar), tiempo en el cual deben participar en un programa de atención integral y reeducativo para romper con su círculo de violencia.
Ahí les garantizan protección, seguridad, hospedaje, alimentación, vestido y calzado, atención médica integral, servicio de enfermería, asesoría jurídica, atención psicológica, programas reeducativos integrales para que puedan participar plenamente en la vida pública y social; capacitación para adquirir conocimientos y habilidades en el desempeño de una actividad laboral, y bolsa de trabajo que les ayuda a tener una actividad remunerada.
“México es un país letal para las mujeres, pues cada día son asesinadas -al menos- 10, mientras que el 95 por ciento de esos crímenes quedan en la impunidad”, evidenció.
“De enero a junio de 2022, el país registró 479 feminicidios. Y tan solo en ese último mes, hubo 2 mil 138 delitos por violación, lo que significa más de 70 violaciones cada día. Debido a esta alarmante violencia, los refugios reportan un incremento del 15 por ciento en el número de personas atendidas, comparado al mismo periodo de 2021, para dar un total de 19 mil 708 mujeres y niños auxiliados” enumeró.
Durante 2021, la cantidad total de personas atendidas en dichos albergues fue de 45 mil 490 (de las cuales, 33 mil 292 llegaron a refugios y las 12 mil 198 restantes, tuvieron apoyo a través de redes sociales y vía telefónica), además se rescataron 38 mujeres a nivel nacional.
“Derivado de esto, es evidente el incremento de este tipo de violencia en el país y la importancia de los refugios, toda vez que salvan vidas y son el mecanismo más articulado para prevenir los feminicidios. Por lo tanto, Operar sin recursos, como lo hacen hasta el momento, pone en riesgo la vida de mujeres y niños víctimas de violencia; además de que vulnera su derecho a contar con un espacio de protección, conforme a lo dispuesto en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, y la Recomendación 19 del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer”.
Por lo anterior –concretó la Diputada federal, “resulta fundamental que -en el marco de la elaboración del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio Fiscal 2023, elaborado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público- se reactive y asignen recursos por la cantidad de 500 millones de pesos, al Programa Refugio para Mujeres Víctimas de Violencia Extrema, ya que por medio de este mecanismo se salvan valiosas vidas que, desafortunadamente y como es evidente, tras una política pública fallida, este terrible delito va en aumento de forma incontrolable.